domingo, 10 de julio de 2011

Crónica Fire!!

Ayer teminaba el Festival Fire!! en la ciudad de Barcelona. Una edición más de este veterano festival de temática gay y lésbica con buen cine y abierto a todo el mundo que en esta edición ha vuelto a tener público, aunque quizás sus fechas veraniegas hacen que no tenga tanta repercusión ni afluencia, ya que la playa y las terracitas ahora tiran mucho.Pues vamos a hablar de las tres propuestas de las que he podido disfrutar en el Festival FIRE!! de Barcelona.

Les amours imaginaires


Pues inauguró esta esperada película del joven realizador canadiense (del Quebec, para ser más concretos, Xavier Dolan). La película cuenta la historia de una chica caprichosa (espléndida la interpretación de Monia Chokri) y su íntimo amigo gay (el propio director, un interesante Xavier Dolan) desde el día que se enamoran del mismo chico (Niels Schneider). En realidad es una historia de tres seres enamorados de la misma persona, ya que el pretendido por la chica y el chico, solo se quiere a sí mismo, haciendo gala de un narcisismo que a mí me ponía nervioso. La película tiene sus buenos momentos y es estéticamente muy kitsch y almodovariana, lo cual es estimulante. Sin embargo abusa de ralentís y tonterías varias y la historia que cuenta acaba por hacerse repetitiva y tan caprichosa como su protagonista, cansando a veces al espectador. Sin embargo, el joven realizador de tan solo 23 años, ofrece secuencias y momentos que hacen que merezca tenerlo en cuenta en un futuro, esperando que una cierta madurez lo centre más en la historia aprovechando su estilo visual artístico y se deje de imágenes en exceso pretenciosas y momentos absurdos (como los insertos de gente hablando de su vida sexual y sentimental, ajenos a la historia, totalmente fuera de lugar). En definitiva una inauguración correcta, pero algo decepcionante.


The blossoming of Maximo Oliveros


Ganadora de numerosos premios, la película de Aureaus Solito se enmarca en lo que podríamos llamar un cine filipino gay de autor y que al mismo tiempo coquetea con la comercialidad. El cine filipino está llena de películas en que la temática homosexual es el centro o parte de la trama. Yo he visto varias de ellas, desde la petarda Zsa, Zsa, Zaturnnah a la muy festivalera y arriesgada Serbis o la más comercial Masahista (estas dos últimas de Brillante Mendoza). The blossoming of Máximo Oliveros tiene muchas de las características del cine filipino de festival pero está lejos de la radicalidad de algunas de sus propuestas. Trata la historia de un chico de doce años que vive como una chica (incluso cocina y cose para su familia de hombres tras fallecer su madre) con cierta normalidad. Hay cierta mofa e insultos, pero el chico es más o menos libre y la película no trata para nada el tema de la homosexualidad o el travestismo. A partir de este chico que se siente chica, utiliza las localizaciones reales de las zonas más humildes de filipinas, se adentra en las chabolas y nos muestra la gente real que en ellas habita, para construir alrededor una historia cercana al cine negro, en que el chico se enamora de un policía recién llegado que empezará a investigar la familia del chico, delincuentes de poca monta envueltos de repente en algo serio. Con un ritmo lento típico del cine de autor filipino (aunque algo más ágil de lo habitual) y con la inocencia sentimental propia del cine popular de este país, en ocasiones excesiva, la película es correcta, a ratos entrañable y en otros dura. Cine negro y sentimental con temática gay de un país que lleva años haciendo cine destacable. Una oportunidad de descubrirlo.

El lugar sin límites


Película de 1978 donde Ripstein ya practica el melodrama con la intensidad que le caracteriza y todo el tremendismo a que el cine y la literatura, hispanoamericana en general y mexicana en particular, nos tienen acostumbrados. La película, que abarca dos épocas de un pueblo dominado por un cacique, nos situa en el interior de un prostíbulo cutre y desamparado regentado por un travesti y su hija prostituta, resultado de una relación accidental del travesti con la antigua jefa del prostíbulo, ya fallecida. Personajes condenados a la infelicidad, un pueblo condenado a desaparecer y un conjunto de secundarios o bien cobardes, o bien violentos, o bien moralmente inadmisibles, se pasean por una película tan excesiva como triste, de escenarios y actos decadentes, a veces divertida, pero siempre envuelta en el halo de la cercana catástrofe. Una buena oportunidad de descubrir, para los que aún no la hayn hecho, a uno de los directores más estimulantes del último cine mexicano, el siempre personal Arturo Ripstein.



10 comentarios:

  1. Anónimo22:59

    Me apunto la de Ripstein. Me encanta.

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  2. Si es que las terracitas de verano!! Yo he estado currando por las noches que es bastante triste y te empiezas a convertir en una especie de vampiro trasnochado. Por suerte hoy es la última noche y me voy de vacas! :-) La que más me llama la atención es The blossoming of Maximo Oliveros. Muy buenas recomendaciones David. Un abrazo!

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  3. Me apunto la de Aureaus Solito y la de Ripstein. Parecen interesante ambas, la primera... la dejo, estoy hartita de narcisistas.

    Una abrazo!!

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  4. Pinta interesante la de Ripstein, me pongo a buscarla. Las otras dos de momento paso. Un abrazo.

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  5. Me interesa la temática gay y transexual y tal, aunque no la que viene ofreciendo Almodóvar en las últimas décadas, su visión un tanto verdulera y kitsch, salvo excepciones como Todo sobre mi madre, que aunque también tiene ese punto kitsch, se disfruta por un gran guión, de considerable fuerza dramática, y unas actuaciones espléndidas.
    La de Ripstein suena de maravilla. A ver si hay oportunidad de verla. Gracias por la estupenda información ofrecida, David. Muy buena entrada, como siempre.
    La filipina tampoco suena mal, aunque si tengo que elegir de las que pones me quedo con la mexicana. Ciao.

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  6. Buena elección yosonico. Un abrazo.

    Bueno BCNdays, que disfrutes tus vacaciones. A mí me queda tanto que no quiero ni pensarlo. La filipina es una buena opción. Un abrazo.

    Pues sí, LAura Uve, el personaje narcisista de la primera es muy cansino. Tus dos elecciones son muy recomendables. Un abrazo.

    Bueno, Daniel, la filipina deberías verla, ja,ja. HAblando en serio, la de Ripstein merece la pena. Un abrazo.

    Bueno Javi, con Almodóvar no nos pondríamos de acuerdo para nada porque para mí es un de los pocos genios vivos del cine mundial (ni Eastwood, ni Spielberg, ni a casi nadie lo considero un genio, así que ya ves). La de Pipstein, es una película antigua, como digo en el post, así que no tendrás problema en encontrarla. Un abrazo.

    Un abrazo Outsider.

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  7. Me parece que has escogido bien, las tres lucen interesantes, abordan la temática gay pero bajo argumentos centrales independientes, como que no solo se centran en ello sino son personajes partes de un contexto y una trama propia, lo cual me agrada porque se vive con mayor naturalidad y menos melodrama tan manido como comercial del que se acostumbra. Un abrazo.

    Mario.

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  8. Pregunta puñetera: ¿Los filipinos no saben hacer cine no contemplativo? parece que han visto la gallina de los festivales de oro jejeje

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  9. Gracias Mario, la verdad es que es cierta tu apreciación. Un abrazo.

    Daniel, esta no es tan contemplativa, ni mucho menos, como otras, pero respondiendo a tu pregunta, hay un cine comercial filipino muy "Kitsch", de una inocencia y cursilería cercana al Bollywood y muy alejado de los festivales. Digamos que le cine contemplativo filipino que va a festivales es cosa de unos pocos directores que han creado algo de escuela y que podríamos enmarcar también en una cierta tendencia en el sudeste asiático. El hecho de que lo hagan con intención festivalera porque ven que tiene salida, es probable, pero también lo hace el cine europeo. Un abrazo.

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