domingo, 28 de octubre de 2012

Películas para Halloween 2012

Por tercer año consecutivo (tras éste y éste, con películas aún muy aprovechables que seguro, en algún caso, no habréis visto) y gracias al éxito de visitas de las dos ediciones anteriores, hoy realizo una nueva tanda de cinco películas para disfrutar en estos días de Halloween en que el cine de terror está tan presente. Como siempre, un poco de todo, de lo comercial a lo alternativo y como siempre, cintas relativamente modernas (este año especialmente).


Este año no puedo dejar de recomendar que os paséis por el imprescindible El último blog a la izquierda de HateLove que ha tenido la bonita iniciativa de realizar un especial Halloween en el que durante los próximos días (ya lleva un par haciéndolo) se irán publicando posts en los que tanto él, como sus colaboradores en el blog, como personas de otros blogs a los que nos ha invitado a participar, proponen una película para estos días. La diversidad hará que tengamos un poco de todo, de clásicos, pasando por cine comercial, alternativo o trash. No os lo perdáis.
Dicho ésto, mi lista de este año:

The Cabin in the woods (2011) de Drew Goddard


La sensación del año entre los aficionados al género. No se trata de una película de terror sino más bien de un homenaje a este género. La película se inicia como cualquier otra, con unos adolescentes muy prototípicos dirigiéndose a una cabaña perdida en medio del bosque. Pero las convenciones están para romperlas. Para romperlas y más allá. Ésto es lo que logra este film divertido, innovador, autoreferencial y con un tramo final que es un festín para los aficionados al terror y que merece ser destacado por encima de los productos que se han realizado últimamente tanto de terror como de cierta parodia, o cierto homenaje al género. Además, el director, Drew Goddard es un director primerizo, así que habrá que estar atentos a su próximo proyecto. Amigos, amigas, vamos para el bosque. A ver quien nos vigila...


The Grudge: Old lady in white (2009) de Ryûta Miyake


En 1999 el director Takashi Shimizu realizó un producto muy independiente con el título de Ju-on que fue un éxito minoritario en festivales especializados. Una segunda parte, un remake con más presupuesto en su propio país y la consecuente segunda parte más un remake americano fueron solo parte de la tirada de esta extraña saga de terror sin demasiado argumento pero muy terrorífica. Para celebrar los diez años de su inicio se realizaron dos proyectos para televisión de una hora. Éste es el mejor de ambos. De nuevo escenas sin demasiada conexión entre ellas más allá de la maldición que perdura sirven al director para ofrecer unas cuantas secuencias de terror puro, eléctrico, muy bien construidas y muy dignas de ser disfrutadas. El inicio es buenísimo y la hora, de un nivel muy alto.

The human centipede 2  (2011) de Tom Six

Imdb: 4     Filmaffinity: 5

Cuidado porque esta película puede herir la sensibilidad del espectador. ¿Os suena?  Pues no es publicidad, es lo cierto. Mirad el abanico de notas que muestra el gráfico de Filmaffinity y veréis los ánimos. En la primera parte de esta saga un científico loco creaba un ciempiés humano cosiendo la boca de una de sus víctimas al culo de la otra. El aspecto escatológico de la película era uno de sus "atractivos", de sus morbos. Pero la película era fría y casi elegante. Esta segunda parte es un desfase y la verdad es que a mi modo de ver una comedia excesiva con un zumbado obsesionado con la primera película y que se propone construir con cutrez (pues en su caso no es médico) un ciempiés humano aún más grande y en este caso sí está obsesionado con el efecto escatológico. Risas para algunos y malestar e indignación para otros. Yo me lo pasé en grande.


Lovely Molly (2011) de Eduardo Sánchez

Imdb: 5'2     Filmaffinity: 4'6

Eduardo Sánchez, uno de los dos directores de la imprescindible The Blair Witch Project y que ha estado dando bandazos desde entonces, la acierta con esta nueva vuelta de tuerca en el tema de posesiones. Una chica recién casada se traslada a su casa familiar que llevaba años abandonada. Pero algo del oscuro pasado de su infancia parece escondido en la casa, en forma de ente y está dispuesto a volver a atemorizarla. Obsesionada, temerosa, la adorable Molly del título empezará a degenerar física y emocionalmente hacia un estado de trastorno. Con secuencias muy logradas de terror paranormal, con explicaciones y conclusiones ambiguas e incluso con una ciertas intenciones que trascienden en mucho el mero género de terror la película es algo irregular, cierto, pero muy reivindicable.


Absentia (2011) de Mike Flanagan

Imdb: 5'7      Filmaffinity: 4'8

Quizás la propuesta más alternativa de hoy. Una película de muy bajo presupuesto, condenada a cierta irregularidad pero con algunos momentos muy logrados de desasosiego y tensión que solo pueden lograrse cuando detrás de la cámara hay cierto talento.
Un argumento que muta, que se puede dividir en tres partes, que tiene uno de los golpes de efecto más alucinantes que he visto en tiempo en un momento de su metraje y que va de cierta cotidianeidad a un delirio absoluto que conecta con la serie B de toda la vida. En conjunto, esta pequeña propuesta con más imaginación y ganas que presupuesto merece conocerse porque está muy por encima de otras cintas de terror, porque demuestra que se puede hacer bastante con talento y poco dinero y porque su atmósfera, siempre enfermiza, está muy lograda.

viernes, 26 de octubre de 2012

Crónicas Festival Beefeater In-edit (1)

Pues ayer jueves se inauguró en Barcelona el Festival Beefeater In-edit, que durante los próximos 10 días va a llenar la ciudad con sus muy interesantes propuestas de documentales musicales. El In-edit es uno de los festivales que no nos acredita de la ciudad (hay bien pocos) y además nos trata con bastante desprecio, así que nuestra predisposición hacia él, sin quererlo, se ve afectada. De todas formas voy a realizar un par de posts al respecto. Este primero que nos ocupa con tres propuestas a modo de introducción al festival y que he visto desde mi casa (y que todos podéis hacer pues circulan por la red)  de los considerados mejores documentales musicales de la historia según la lista que ha confeccionado el mismo festival y que podéis ver completa aquí. Concretamente hablaremos del los dos primeros de la lista y del cuarto. Recordad que los 10 primeros de esta lista de 100 se proyectan durante el In-edit. El segundo post será una vez terminado el festival, con alguna de las propuestas que veré o bien en salas, o bien en el in-edit tv donde todos podéis ver, previo pago, algunas de las películas que se proyectan casi simultaneamente al festival. Si estáis interesados os recomiendo entrar, pues hay de muy, pero que muy interesantes (y muchas de mi lista de 15).

Pues empezamos. Primero os dejo el spot del festival con fragmentos de algunas de las películas que se proyectan y paso a comentar los tres títulos en cuestión (por cierto, me place recuperar mis estrellitas, que los 84's me las tenían "secuestradas"):




Número 1 de la lista: Dont Look back (1967) de D. A. Pennebaker

El director D.A. Pennebaker nos muestra en Dont look back un collage de poco más de hora y media montado a partir de tres semanas que Bob Dylan pasa en el Reino Unido en 1965. El mayor mérito de la película es que la filmación, el filmador, parecen no existir. La cámara no parece subjetiva, ni manipulada ni tenida en cuenta por los presentes. La cámara parace flotar en el ambiente, invisible y captar la vida que se convulsiona a su alrededor. Lo que vemos es a Bob Dylan, con 23 años, emergente en su fama y su carrera y dando muestras claras de ese orgullo, esa altanería, esa arrogancia y ese desprecio por los demás que seguiría alimentando su fama de outsider en las siguinetes décadas. Dylan compone canciones poéticas que parecen tratar temas profundos, filosóficos, sociales. Dylan es un cantante folk. O al menos eso dice la prensa y cree parte del público. Él se encarga de desmentirlo. No cree en Dios, no quiere representar a nadie, le dicen que es un cantante folk porque no entienden nada, no quiere ser espejo en el que nadie se mire, ni luchar por nadie, casi ni quiere tener relaciones amistosas con nadie. Solo quiere vivir su vida. Y su ego. Y la película da muestras de su prepotencia en diversas conversaciones y momentos.
El documento es indispensable como testimonio de una época, de una forma de vida de unos cantantes, no hay guión, no hay lógica, fluye, se va de la calma al caos, de la serenidad a la tensión, de cierta amabilidad a un brutal desprecio en el trato de sus semejantes. Se deja entrever el lado de genio de Dylan, aparece su séquito, se deja ver más el lado humano y soberbio del artista. Se deja ver lo que ocurre. Se deja ver la vida. Muy recomendable.


Número 2 de la lista: Let's get lost (1988) de Bruce Weber

En 1986, el prestigioso fotógrafo de moda Bruce Weber conoce a Chet Barker, un personaje icónico que lo tenía obsesionado desde su infancia, cuando lo veía espléndido en las portadas de sus discos. Sin embargo Chet Barker, el virtuoso de la trompeta, ni es ya el bello hombre de los 50 ni el virtuoso en la cúspide del glamour. Más bien todo lo contrario. Está consumido por las drogas, casi olvidado y con un aspecto muy decrépito. En la idea de Bruce Weber reside la genialidad del documental. Por un lado intenta trazar mediante fotografías antiguas y testimonios de sus familiares, mujeres, conocidos e incluso sus propias confesiones un relato de lo que es el auge del músico y su posterior caída en el olvido y la drogadicción. Sin embargo, la película no es un estudio pormenorizado de Chet Barker sino más bien retazos. A ello, se une la idea más brillante del film, la que compone la otra parte del mismo, el fotógrafo se lleva al músico a lugares glamourosos, lo rodea de gente joven y bella, lo sube a una limusina, le deja volver a cantar, a actuar, con una voz que apenas le responde, le devuelve a sus años mozos, aunque en realidad se trate de una gran mentira hecha a su medida, una mentira que pretende ser un regalo, no una burla.
Sin embargo, las imágenes y fotografías de archivo mezcladas con la fantasía actual y con los testimonios duros de la vida de Chet Barker, logran cargar la película de un poso de tristeza, de melancolía por la juventud perdida, casi por la vida malograda, por el talento desperdiciado. Fotografiada en un espléndido blanco y negro, pasado y presente se confunden, se solapan y casi mantienen una conversación entre ellos.
La película no es de fácil visionado y cabe decir que lo predominan son los testimonios. En mi caso me pareció más brillante la idea que la propia ejecución, pero sin duda, algunas secuencias, el discurso de juventud perdida y el espléndido blanco y negro hacen de Let's get lost un documental muy recomendable, que si se ve con cierta predisposición, bien seguro que merece la pena.


Número 4 de la lista: Gimme shelter (1970) de Albert Maysles, David Maysles & Charlotte Zwerin

Gimme shelter es un documento devastador. Estamos en 1969. Pocos meses atrás se había celebrado el festival de Woodstock y todo parecía indicar que la paz y el amor pregonado por el movimiento hippie había llegado a su máxima expresión. Los Rolling Stones están realizando una gira por EEUU. Parece ser que estaban molestos por ciertas críticas recibidas sobre el excesivo precio que cobraban por sus conciertos. Así que deciden seguir el ejemplo de Woodstock y realizar un concierto gratuito como cabezas de cartel junto con otros grupos importantes del momento. El despropósito es mayúsculo y la película documenta brutalmente lo ocurrido para no dejar títere con cabeza. Los perjudicados son todos. Los organizadores y abogados y managers de los Stones que improvisan un concierto en un lugar inadecuado y con poca accesibilidad y seguridad. En segunda lugar los motoristas Ángeles del Infierno, a quien no se sabe con certeza si los Stones o la organización les ofrece a cambio de cervezas y poco más la seguridad del evento. Y la lían con actos de violencia brutales que terminan con el asesinato de un joven negro. En tercer lugar el propio grupo con Mick Jagger a la cabeza, que ensimismados en su estrellato, en su mundo irreal de egos desbocados, no solo no se ven venir la situación sino que no saben como resolverla, más allá de lanzando cuatro frases egocéntricas y absurdas que los delatan, que los ponen a la altura de los ineptos. Y por último, sale retratado el público, los propios hippies, que en algunos casos terminan por perder el control debido al consumo de alcohol y drogas y deambulan desnudos, drogados, violentos o salidos por las cercanías del escenario, intentando asaltarlo, desmayándose, dando a luz, en lo que es una coreografía vomitiva de la suciedad y los excesos que para el espectador, sin duda rompe las pocas ideas que aún pudiera albergar de aquella etapa como algo admirable o envidiable o reivindicable.
Los conciertos jamás volverían a ser igual y primaría la seguridad y la cordura. Los hippies y su movimiento quedaría tocados de muerte. El chico de 18 años, Meredith Hunter, perdió la vida absurdamente. Los 60 acabaron. Y los sueños anárquicos de muchos terminaron con dicha década.
La película lo documenta todo. El previo, el brutal crecimiento de violencia y caos durante el concierto y la moviola posterior donde los Stones ven las imágenes y no saben ni como reaccionar. Es demoledor, sí, pero es sensacional.

Recordad, desde ayer jueves hasta el domingo 4 de noviembre, el Beefeater In-edit en Barcelona. En el cartel del lateral del blog, como siempre, el enlace a la página del festival para interesados. Y los que no estéis por aquí, en in-edit tv parte del festival. Disfrutadlo.

lunes, 22 de octubre de 2012

Mis 15 películas favoritas del Beefeater In-edit 2012

Pues como avanzamos en el post anterior, vamos a dar nuestra personal selección sobre 15 (sí, ya sé que dije 12, pero al final ya me conocéis) de las películas que más nos apetece ver del Beefeater In-edit 2012, intentando movernos un poquito por las distintas secciones que componen el festival y para terminar, vamos a dar un breve paseo por sus actividades paralelas para finalmente, haceros un modesto regalito. Para consultar la programación concreta, aquí. Recordad que el festival se celebra entre el 25 de octubre y el 4 de noviembre.

Sección Oficial Internacional

Don't Follow Me (I’m Lost). A Film About Bobby Bare Jr. (web del film)

Varias circunstancias juegan en contra del indie-rocker Bobby Bare Jr. en la ruleta del éxito y la fama. Para empezar es el hijo de un auténtico ídolo de la música country (Bobby Bare Sr., talento mítico del Grand Ole Opry) y participó de niño en algunos duetos melindrosos con su progenitor. Eso nunca ayuda. Luego está su creciente progenie (cuatro hijos), una ex-esposa, el escaso reconocimiento mundial hacia su talento y una tendencia a ponerse gruñón (y más bien roñoso, por no decir decididamente explotador) con la banda de acompañamiento que le sufre. Don’t Follow Me (I’m Lost) cuestiona sus dicotomías: padre ejemplar o marido ausente, oveja negra o vástago modelo, genio incomprendido o incapaz gafado... Todas sus caras están aquí, en un filme sincero y cariñoso que, sin embargo, no esconde la cabeza a la hora de mostrar el lado no-simpático del protagonista (“No me vendo porque nadie me lo ha ofrecido”, declara). He aquí una obra que retrata el lado empinado del rock y la paternidad, y que recoge con fidelidad el tipo de vida que puede llevar un músico cuarentón no-agraciado, con un montón de facturas por pagar y un padre que siempre hace sombra.


Tenéis un tema de Bobby Bare Jr. en el facebook de Lost Highway Blog


Gozaran - Time Passing (web)

“Voy a hacer posible lo imposible”, o Mahler y Cage en el mundo persa. Tras pasar treinta años en Viena, el director de orquesta Nader Mashayekhi regresa a Teherán, su ciudad natal, para intentar poner en práctica un sueño: fundar una orquesta de música clásica occidental en Irán. O, en sus propias palabras: “Vamos a darles la vuelta a los últimos ciento cincuenta años. Que la cultura europea venga a nosotros”. Todo el mundo, incluyendo su padre (poeta retirado), le advierte que se está metiendo en un fregado de consecuencias funestas. Gozaran Time Passing relata su epopeya, sus sueños y aspiraciones, acompañándole en cada recodo y en cada tropiezo (porque quizás la música no sea tan universal como dicen). Durante este periplo, veremos al director de orquesta rizando el rizo de lo arriesgado (contratando a mujeres trompetistas que han mantenido su pasión secreta durante años) mientras reflexiona sobre conceptos profundos (“Podemos desarrollar una nueva actitud como oyentes, porque no tenemos inhibiciones heredadas”) y músicos amados. Un filme lleno de poesía y cambio que descoloca lugares comunes y reedifica “una nueva visión para una nueva generación”.





I Am Not a Rock Star (web)

Quizás el mejor examen sobre el fenómeno de los niños prodigio. La superdotada pianista canadiense Marika Bournaki toca su instrumento como Dios desde muy tierna edad, guiada en el periplo académico por las firmes manos de padre y maestra. I Am Not a Rockstar se propone documentar un proceso de crecimiento (de los doce años hasta los veinte) que muy temprano desemboca en circunstancias insospechadas, y el crudo proceso de ruptura (tanto familiar como profesional) explota en un huracán de rabia juvenil y ansia de libertad personal. Un genio que reclama ser más que eso, y exige que le devuelvan su humanidad y normalidad. El filme investiga en las causas del desencanto (expectativas paternas de artistas frustrados –padre violinista, madre bailarina-, infancia inexistente, sobrecarga de aspiraciones...) y registra cada muesca en el cercenado camino a la fama. El resultado final es un certero examen sobre la dualidad pasión/negocio (“Me encanta la música, pero no me gusta tocar para la gente. No soy una rockstar”), así como un cristalino análisis de los conflictos familiares y el desgaste que produce crecer en público. De niña a mujer y de genio a persona.



Searching for Sugar Man (web)

En In-Edit hemos programado varios documentales sobre rescate de artistas olvidados, pero nunca el género “¿Dónde estará ahora?” había alcanzado las proporciones épicas de Searching for Sugarman. Es, de veras, igual que un filme de misterio. El desaparecido de marras es Sixto Rodríguez, de nombre artístico Rodríguez a secas, que a mediados de los sesenta grabó dos álbumes de espléndido y ácido folk-rock protesta en el sello Sussex, para luego esfumarse entre la bruma de los días. El documental procesa la búsqueda de aquel ignoto Dylan hispano-filipino sin dejar escapar spoilers, de forma que vamos quedándonos boquiabiertos en progresión creciente según avanza la trama. Fans, detectives y familia empiezan desmintiendo los primeros rumores (uno de los más extendidos era que se había pegado un tiro en directo), y vamos descubriendo que Rodríguez era famosísimo en Sudáfrica, donde se le veneraba más que a Rolling Stones y Beatles juntos. Más aún: sus canciones eran himnos para la juventud anti-apartheid blanca del país, y vendió millares de discos (sin cobrar royalties). Pero: ¿vive aún? El desenlace de este memorable docu-thriller tendrán que descubrirlo ustedes mismos.



Sunset Strip (web)

Hay calles y calles, y luego está La Calle. Sunset Strip no es una avenida cualquiera. Arteria central de Los Ángeles, de los clubes del centro a las villas de Sunset Boulevard, su historia es casi la del entertainment. Esta es su saga, tan llena de nombres propios y lugares santos que abruma. Pues Sunset Strip ha visto brillar al viejo y nuevo Hollywood; el punk; el hair metal; los agitados 60’s; los clubs de strip tease; los gángsters famosos; los clubes con nombres bíblicos (como el Garden of Allah); los cómicos que luego serían actores célebres (John Belushi, Richard Pryor, Robin Williams); ha visto los disturbios (las memorables “riots” en Sunset Strip, provocadas por el cierre del club Pandora’s Box); el fenómeno de las grupis y las mamadas bajo las mesas del Rainbow (como afirman Steve Jones y Tommy Lee); escritores y poetas, beatniks, rockers y pirados de todo tipo. Todo parece empezar y terminar aquí, del fulgor al ocaso. Pero queda la purpurina, siempre. Sharon Stone, Slash, Johnny Depp, Alice Cooper, Dan Ackroyd, Stephen Stills, Keanu Reeves, Kenneth Anger, Mickey Rourke y muchos, muchos más celebran su magia desde 1906 hasta hoy.



Uprising: Hip Hop and The LA Riots

Ha sucedido antes: el hip hop como oráculo y pregonero de un hecho histórico o un proceso político. Pero quizás este sea su caso más notorio. Uprising: Hip Hop and the L.A. Riots da inicio en el instante en que prendió la mecha (la paliza a Rodney King en marzo de 1991) y el momento de la primera explosión de ira (el juicio que declaró inocentes a los policías). Y, desde allí, procede primero a hacer historia –narrando la atmosfera de brutalidad policial y apartheid que se institucionalizó en la zona desde los 60 y las revueltas de Watts; continuando con las crack wars de los 80- y luego se lanza al apabullante detalle: un minuto a minuto de lo que sucedió en aquellos tres días de furia imparable, protesta espontánea y ocasionales conatos de deshumanización ciudadana, racismo dentro del racismo (negros contra coreanos) y rabia ciega. No sorprende que la mayoría de los narradores sean rappers, pues la mitad estaban allí y llevaban años presagiando el estallido (Snoop Dogg, Ice-T, Ice Cube, Dr. Dre y NWA en pleno, KRS-One, Too Short...) pero también hablan cineastas como John Singleton y decenas de ciudadanos de a pie. Una obra imprescindible.



Sección Oficial Nacional

Adrià Puntí

Cuatro vertiginosos minutos iniciales repasan la carrera (cinco elepés) de Umpah-Pah en un bombardeo de imágenes, recortes y declaraciones. Vemos cómo disolvió al grupo en 1996, cómo hizo pinitos como actor de teatro y luego reapareció con su debut en solitario Pep a la llarga, al que seguirían dos álbumes más. Un dramático punto y aparte nos presenta al Puntí de hoy: agudo, reflexivo, delirante, complejo. Quedamos con él en su calle, tocando “El bulevard dels xiprers” en la puerta de su casa, después rasgando la guitarra en la plaza de su pueblo, y más tarde emocionándose al hablar del proceso compositivo y el mensaje de una canción. Cosas que salen de alguna parte oscura, y duelen. Su no-normalidad –separada de la normalidad por una línea muy fina- se presenta aquí como un pozo creativo, un grifo vital, recordando por momentos aquella frase de Nelson Algren: “Cuando la gente como tú o yo nos volvemos normales, estamos muertos”. O, como afirma el propio Puntí: “M’estimo més el que tinc aquí dins que el que veiem a fora”. Puntí, incomprendido a veces pero siempre singular, nunca se abrió tanto.

Aprovechando que no tenemos trailer y que me temo que el genio de Adrià Puntí no debe ser nada conocido fuera de Catalunya, os dejo el siguiente tema suyo, brutal, con un final desgarrador. Si alguien está interesado en la traducción de la letra, me presto a hacerla y enviársela:


Made in London: Julien Temple

Retrospectiva de este reconocido director especializado en documentales musicales

Glastonbury

En 1971, un joven teenager llamado Julien Temple se escapó de casa para ir a un festival llamado Glastonbury Fayre, en Somerset. Allí se uniría a 12.000 danzantes fans en un par de días de desparramo, baile y rock que grabarían en el joven Temple una huella indeleble. Treinta y cinco años después, el festival de Glastonbury es uno de los más importantes del planeta. Ha pasado por tantos estadios que marea recordarlos. Año sí, algunos años no, luchando contra vientos y mareas (barro, gente colándose, oposición de la gente de la zona, huelgas...) hasta hoy, en que Glastonbury es uno de los eventos más celebrados del mundo, con una ocupación estabilizada en 112.000 personas. Pero es difícil, documentar algo tan grande. Que se lo cuenten a Temple. Con más de 900 horas de filmaciones privadas, la ayuda de Channel 4 y la BBC, y el material que el propio director había recolectado, nace Glastonbury en poco más de dos horas de metraje. Fans, grupos no identificados, barro, más fans anónimos, disfraces, juegos: un retrato emocional sin parangón que habla más de la experiencia sensorial y comunitaria que del plantel de artistas que danzan en el escenario.



Top 10/100


Esta sección programa las diez mejores películas de la selección de los 100 mejores documentales musicales de la que hablamos en el post anterior. Todos pues son muy recomendables, pero ya que no podemos ponerlos todos aquí pues acapararían la lista, me inclino por un par.

Dont Look Back (web)

El documental musical más influyente que existe, y punto. El director da significado a la palabra “clásico”, documentando en 1965 la gira inglesa de Dylan: periodistas mancillados, managers belicosos, fans sin aliento, ilustres compañeros de viaje (Joan Baez, Donovan, Alan Price) y, en el centro, un artista folk en proceso de convertirse en astro pop, más ácido e inspirado que nunca. Aquí es donde oyeron por primera vez aquellas frases de “No creo en nada. No veo que haya nada en lo que creer”. Donde Albert Grossman le suelta al gerente de un hotel aquellas inmortales palabras: “Usted es uno de los gilipollas más capullos con los que he hablado en mi vida”. Todas esas anécdotas que quedaron inscritas en mármol para el resto de la historia: las fans subidas al capó, el micro que no funciona, el desplante a Joan Baez, la bronca del “¿quién ha tirado el vaso?”, la humillación a la que someten (con la ayuda de Alan Price, de los Animals) a un petimetre periodista, el encuentro con un sicofántico Donovan, las ruedas de prensa y aquella camisa a topos. Una cosa mí-ti-ca que hay que ver entera una vez en la vida, como mínimo.



Gimme Shelter

Altamont es el mal rollo. Altamont es el fin de los años 60, tipificado en los palos de billar con los que los Hell’s Angels agreden a los peaceniks del festival. Esa inocencia, aquel sueño hippie de paz y amor, termina en Altamont, acuchillado por grasientos Ángeles del Infierno y dinamitado a distancia por Vietnam. Aunque Gimme shelter es una fabulosa panorámica de la gira de 1969 de los Stones por los USA, aunque se suceden los momentos espectaculares (Keith Richards escuchando por primera vez “Wild horses”, las hilarantes ruedas de prensa, los conciertos) es Altamont el cénit y personal sitio oscuro de este celebrado documental de Albert Maysles. Altamont, donde un Mick Jagger más desconectado que nunca pide que la gente “se enrolle” mientras el servicio de seguridad criminal acuchilla a un chico negro en primera fila. Altamont, donde los Hell’s Angels interrumpen el concierto de Jefferson Airplane y toman el escenario para amenazar al grupo. Altamont, todo el mal karma de una década almacenado hecho festival rock, y un documental bravo, intrépido, observacional, que deja mal cuerpo pero que es básico visionar.



Sección Fan

Nueva sección en que los fans votan y deciden poder volver a ver alguna película presente en la pasada edición del Festival.

Sigur Rós: Heima (web)

Heima, en islandés, significa En casa. Significa hogar, país de origen. Y tras dos años de silencio, los reyes de la quietud nórdica Sigur Rós vuelven con un nuevo disco y documental centrado en su tierra. Estos son los Sigur Rós en el entorno que los creó. Grabado a lo largo del verano de 2006 en innumerables puntos de la geografía islandesa (pueblos fantasma, fábricas de conservas, parques nacionales, glaciares, pero también ciudades y mega-conciertos), Heima coloca paisajes que quitan el hipo y los une a reflexiones del grupo. Y también, por supuesto, a canciones (dos de ellas inéditas). La música espectacular –de esa forma tímida y oscura que es su marca de fábrica- se mezcla con un país espectacular. Un grupo excepcional metido en un escenario excepcional. El único escenario que podía crear a una banda autónoma, cambiante, íntima como Sigur Rós. Un documental meticuloso y cuidado que es también una prueba de amor hacia el sonido y las raíces.



Sesiones especiales

In-Edit. Get What You Want

“Nosotros lo que queremos es que haya historias”, aduce el director artístico de In-Edit, Luis Hidalgo. No miente: se trata exactamente de eso. La pasión por la música y la pasión por las vidas agazapadas tras ella crearon hace diez años el In-Edit, Festival de Documental Musical de Barcelona. Entusiasmo irredento, en suma, es de lo que ha ido esta década de aventuras. Eso, y amor por ese sonido mágico que llamamos música. El equipo del festival debate el espíritu de In-Edit (“Lo hacemos porque lo sentimos”, afirma su director Cristian Pascual) y las fuerzas que lo impulsaron (los fundadores Alberto Pascual y Uri Altell); los músicos (Raimundo Amador, Jaime Urrutia, Ariel Rot, Fermín Muguruza en su doble papel de músico-director) hablan de lo suyo: la música; y los directores de documentales (D.A. Pennebaker y Chris Hegedus, Murray Lerner, Don Letts, Matt O’Casey, Albert Maysles y Julien Temple, entre otros) comentan cómo plasmar esa música en un filme. En resumen: algo más que un simple festival, plasmado aquí con cercanía de espectador. Raimundo Amador declara: “Yo quiero a este festival”. ¿Y quiénes somos nosotros para quitarle la razón?



Excedlents

Je Suis Venu vous Dire... Gainsbourg par Ginzburg

El cantautor francés regresa de la tumba. No literalmente, no teman: se trata de una autobiografía ensamblada hoy mediante entrevistas, actuaciones, letras y canciones tomadas de diversas fuentes a lo largo de su extensa carrera. Lo amplio de la perspectiva y lo rico de la fuente (quizás el cantautor más versátil, talentoso, poético y a la vez bocazas y canalla de Europa) configuran un retrato de Serge Gainsbourg que es todo elegancia y profundidad. Por supuesto, eso no implica que Gainsbourg no las diga de la altura de un campanario: merece la pena ver el documental solo por los gloriosos axiomas que escupe nuestro nicotinado héroe a lo largo de la obra. Sus frases sobre sexismo (“Era la misoginia encarnada”), mujeres, talento (“Tengo talento, no genio”), el binomio feúra/belleza (“No existían caras como la mía entonces”), cinismo (“Un cínico conoce el precio de todo y el valor de nada”), timidez (“No soy una persona aguda y detesto los clichés. Mi destino es permanecer callado”) y alcoholismo, además del espectacular trabajo de archivo, hacen de Je suis venu vous dire... un perfecto epitafio para el showman que devoró al hombre.



Quadrophenia: Can You See the Real Me?

Celebrado hoy como obra maestra, poca gente recuerda los fatídicos comienzos del álbum, concebido en solitario por Townshend y entregado al resto del cuarteto en forma de demo. Su nacimiento se debe a un bajón; un bajón de anfetamina, para ser exactos. En las garras de la resaca, el líder de The Who trazó el concepto original del disco: la historia del mod Jimmy y sus cuatro personalidades esquizoides. Townshend admite también que luego tuvo que adaptar la narrativa para que la música rock encajara con los otros “tres cabestros” del grupo. Esa es la puerta de entrada que abre el documental , que procede entonces a ofrecernos un tesoro de detalles: se establece con gran atención la verdadera historia de los mods originales (y cómo Townshend se convirtió en portavoz de los mods “no articulados”), se profundiza en el mensaje lírico y el significado oculto de algunas canciones, se describe cómo se construyó el estudio más ruidoso del mundo y la consiguiente gira desastre (en la que The Who abandonaron por completo Quadrophenia). Multitud de material inédito y las cáusticas afirmaciones de Townshend hacen de Quadrophenia. Can You See the Real Me? una narración muy especial.

Venga va, si domináis el inglés, regalito:



Premios

Cintas premiadas en los certámenes que el In-edit realiza en otras ciudades.

Vou rifar meu coração (web)

¡Drama! ¡Ruptura! ¡Desazón! ¡Cuernos! ¡Fornicación! He aquí un sentido repaso a la imaginería romántica y erótica del Brasil con dos puntos de apoyo: las canciones de brega (música cursi) y los testimonios reales de enamorados y traicionados (mecánicos, amas de casa, padres de familia...). El cancionero relamido aunque veraz de la brega se nutre de las vivencias de estos ciudadanos, que a su vez aprenden a relatarse sus cuitas haciendo uso de la lírica breguista. Es un circuito que se retroalimenta. Eu vou rifar meu coração (“Voy a rifarme el corazón”, un título que es 100% brega) conversa con los intérpretes más destacados del género (en su mayoría desconocidos en Europa: Nelson Ned, Lindomar Castilho, Wando, Amadeo Batista, etc.) y contrapone sus declaraciones a las de los fans de la brega o aquellos cuya experiencia se refleja en las canciones. Juntos coinciden en temas cruciales como virilidad, amor no correspondido, bigamia (como lo oyen: aparecen varios individuos con familias-franquicia), virginidad en la mujer, prostitución y malandreo, celos y los consiguientes crímenes de amor... Canciones que explican vidas, vidas que son canciones.



Actividades paralelas

Finalmente citar la existencia de una actividades paralelas que podéis ver aquí.

Inauguración, Master Class, sesiones muy especiales, pases de películas con concierto del protagonista de la misma o maratón nocturna, conforman algunos de las estimulantes propuestas de esta sección paralela. Por cierto, lo prometido es deuda, así que mi modesto regalito es este documental concierto que se podrá ver dentro de la maratón. Os lo dejo completito para que lo podáis ver desde casita:

Hungarian Rhapsody: Queen Live In Budapest ‘86

Este filme, grabado en 1986, empieza con una vertiginosa secuencia: cómo se levanta una tarima para Queen. Desde allí, y con la multitudinaria asistencia de los esperados 80.000 fans húngaros, puede dar inicio la fiesta. Hungarian Rhapsody: Queen Live in Budapest lleva todos los artilugios de serie que podrían esperarse de un concierto de Queen en plena cima de su etapa 80’s: pirotecnia desatada, alambicados y extensos solos de Brian May, trotes gimnásticos de Freddie Mercury (ataviado para la ocasión con una suerte de chándal de los húsares), sobrados efectos luminotécnicos y riffs rockeros como para parar un tren. La ristra de hits (“One vision”, “Radio GaGa”, “We are the champions” y decenas más, de todas las épocas) se complementa aquí con varios interludios extra: Mercury comprando bibelots decorativos para su mansión, pruebas de sonido de Mercury (luciendo vistoso chándal color canario), Mercury saludando a los fans... Pero lo que realmente necesitan en una maratón (colosal volumen y cancionero imparable) está en el concierto. Quizás Queen no inventaran el cock-rock de estadios pero, como puede verse aquí, ellos lo hicieron grande. Muy grande.



miércoles, 17 de octubre de 2012

Festival Beefeater In-edit 2012 (1) Apuntes previos.

Ya sabéis los más veteranos lectores de este blog que tras Sitges, los festivales empiezan a sucederse de manera vertiginosa en Barcelona. Y también sabéis que en este blog, luego las cosas evolucionan un poco como vienen, uno de los principales objetivos (como se dice en su descripción) es dar a conocer dichos festivales y en la medida de lo posible, ayudar a su difusión y a hablar sobre ellos durante los mismo con crónicas, opiniones, tweets o lo que sea.
Pues la semana que viene se inicia el  Beefeater In-edit, un festival específico que programa documentales musicales y que triunfa cada año más en nuestra ciudad, que cumple en esta edición su décimo aniversario y se ha dispersado por otros puntos del globo terráqueo con ediciones paralelas no solapadas en el tiempo y con una programación distinta en cada ciudad. El festival se celebrará entre el 25 de octubre y el 4 de noviembre. Los cines Aribau y Aribau Club, más alguna sesión en la Filmoteca, serán sus principales sedes.
La programación es muy diversa y la podéis consultar de forma completa aquí. En el próximo post pasaré a destacar 12 títulos de su programación y hablaré un poquito de sus actividades paralelas. Pero antes quiero destacar dos cositas que me parecen muy interesantes y de interés para todos, incluso en este caso aquellos que no podáis visitar el festival por motivos geográficos o los que fuere.

En primer lugar advertir que hace unos meses que el festival posee un canal de visionados on-line llamado in-edit tv, que por precios muy razonables ofrece documentales musicales muy interesantes a sus clientes. Es una cadena muy nueva y de momento los títulos disponibles solo rondan el medio centenar, pero en los próximos meses conseguirán muchos más derechos de películas y además, se nos promete que un 25% de la programación del festival estará disponible en este canal. Y ésto sí es el futuro (cada vez más el presente, aunque tímidamente) de los festivales, programar al mismo tiempo en cines y en plataformas de visionados on-line. Así pues una noticia útil para todos los aficionados al cine documental musical, sean o no de Barcelona, durante el festival y el resto del año.

En segundo lugar quiero ayudar a difundir la lista que el festival, para celebrar estos diez años de existencia y con la colaboración de 100 críticos de cine ha realizado. Se trata de los 100 mejores documentales musicales de la historia según estos encuestados. Los 10 primeros se podrán ver durante esta edición del festival. Algunos de los otros (poquitos) están disponibles en in-edit tv o filmin. La lista es sin duda una referencia que debido a la ausencia hasta ahora de un tipo de listado tan específico gana aún más enteros. Podéis consultarla en el enlace y disfrutarla a partir de ya, por los distintos métodos que tengáis a vuestra disposición.

He decidido dividir en dos este post sobre el festival, que en principio tenía pensado hacer del tirón, para dar más importancia a esta lista de 100 películas y a esta plataforma de visionados on-line. Así los interesados podéis dedicarle un tiempo a ambas cosas sin que yo os atosigue con  mi recorrido por mis favoritas de la presente edición, que será en los próximos días.

Mientras, en Facebook y en Twitter seguiré dando información, adicional a la del blog, sobre el festival. Animaos a seguidme.

domingo, 14 de octubre de 2012

Crónica del festival de Sitges. Día 10: El palmarés ensalza Holly Motors, el festival se despide con perlas

Pues ya estoy de regreso a mi casita tras estos días en Sitges. En este post, que ahora mismo se me antoja complicado debido al enorme cansancio que llevo acumulado, quiero tratar de varias cosas. En primer lugar querría exponer algunas breves opiniones sobre el nivel del festival, también comentar de forma breve el palmarés y agradecer y recordar a todos aquellos que me han facilitado el trabajo o me han acompañado estos días.
En segundo lugar, como siempre, hablar de las cuatro películas que vi ayer y finalmente hacer mi top-15 del festival.
Como tardaré algunos días en volver a publicar, si queda largo, podéis leerlo por partes y con calma. Voy para allá.

Conclusiones

Para empezar decir y reconocer que en el aspecto organizativo, uno de los puntos débiles del festival, la cosa ha mejorado mucho (y ya va algunos años que mejora edición a edición). Los terribles retrasos de otras ediciones han sido mínimos y los problemas con subtítulos y proyecciones (excepto un parón en una peli, que yo sepa) han brillado por su ausencia. También para la prensa han mejorado la recogida de tickets respecto al año pasado, ahorrándonos molestias e insufribles horas de colas. Hay cosas negativas, claro, pero como son las menos y todo ha mejorado, pues las vamos a obviar y felicitar al festival por las ganas y la intención de mejorar año tras año.
En el aspecto de programación, es obvio que cada vez la programación es más atractiva en cuanto a nombres y que cada año hay más pelis buenas. Lo que se suele comentar es que hay demasiadas y muchas de relleno que el festival podría ahorrarse. Yo creo que hay mucha mediocridad para rellenar, pero como quizás las que para mí son mediocridad para otro son buenas y las que para mí son brillantes para otros son basura, quizás en realidad mi crítica no tiene razón de ser. Pero es la sensación que me llevo, año tras año. Por otro lado decir que ha sido uno de los años con títulos más polémicos y de opiniones más encontradas y extremas (lo que tiene su gracia pero desgasta) que yo recuerde. Títulos como lo nuevo de David Cronenberg, Rob Zombie, Harmony Korine, Guy Maddin, Carlos Reygadas y algún otro títulos como Berberian Sound Studio o The weight han radicalizado y mucho las opiniones de los asistentes al festival. Yo siempre he dado las mías con sinceridad y contundencia, que es como vivo el cine, pero quien quiera saber otras, durante el festival he hablado de muchísimos otros compañeros que cubrían el mismo y que en muchos casos, pensaban radicalmente distinto. Y para muestra, la exitosa tabla de puntuaciones que han organizado los cracks de Después de 1984 y que ha sido un éxito. La diversidad de opiniones está allí, sin duda.

En el aspecto personal he disfrutado del festival de forma, como siempre, excesiva, aunque reconozco que las pocas horas de sueño y la enorme cantidad de películas, sumado a los posts y otros contratiempos me han pasado factura y tuve un par de días realmente espesos. Pero como siempre, forman parte de esta locura que son los festivales y que me encantan. He visto en el festival 45 películas. De la lista de 25 que puse como mis prioritarias antes de empezar solo me he perdido tres, Dracula 3D porque era imposible cuadrarla sin dormir aún menos (y menos eran tres horas y era una locura), Post Tenebras Lux porque coincidía con la sorpresa de Korine y opté por esta última y Outrage Beyond de Kitano porque era el último día y tras unos minutos me dormí (estaba roto) así que decidí a media proyección salir y verla otro día en condiciones más presentables. A parte, antes de empezar el festival (como reflejé en el post previo) había visto 19 películas que forman parte del mismo, así que el número de películas que en estos momentos he visto del festival asciende a la friolera de 64 películas. Como veis, una locura. De todas he hablado, con más o menos brevedad, con más o menos acierto. Este ha sido mi "trabajo" por diez días y espero os haya gustado y servido.

Palmarés

Voy a ser muy breve con el palmarés, porque de lo podéis consultar completo aquí. Pese a mis prioridades, al menos los premios no me parecen un escándalo. Sin duda Holy Motors gustó mucho y su riesgo puede ser muy premiable. Éso sí, encuentro a faltar el premio a Denis Lavant, merecidísmo, pese a que el ganador Vincent D'Onofrio, estaba realmente bien. Me alegra la mención especial del jurado de la crítica a Berberian Sound Studio, una película que creo era mucho mejor de lo se quiso o pudo ver en Sitges y me gusta que se premiara Wuxia y sobretodo la cinta de animación Wolf Children. Creo que es repartido y opinable, pero al menos no unos premios mal concedidos. Y ya es mucho.

Agradecimientos y recuerdos

A Jordi Miró, que me asesoró y me facilitó elementos para una conexión a internet que por momentos había parecido muy improbable, por allá donde yo estaba. Así que en parte, los posts son gracias a él. Y a las abuelas que han cuidado de su nieto (mi hijo) durante estos días que yo (y algunos Sandra) nos hemos permitido este lujo festivalero que es Sitges.
Y obviamente a todos los compañeros con los que he compartido charlas y proyecciones y tweets, que son muchos. Obviamente, en primer lugar, los de siempre. Sandra, claro, BCNdays, Alan Smithee, Daniel Gálvez, John Prskalo, Álex y Kathy. También hemos estado mucho con HateLove y Natalia (a quien me parece recordar que no le gusta Uncle Bonmee...). He tenido el placer de conocer a Ricard de Clàssics del cinema y a Gerard. Como cada año un día me acompañó Alberto. Y otor día Sonia con Beto. Y otro Alberto, colega de Dani, pasó mucho tiempo con nosotros. Como otros colegas de colegas, Sara y Franky, con quien ya hemos coincidido en otras ocasiones y que son simpatiquísimos. Finalmente (y si me olvido de alguien ruego me perdonéis) algunos nuevos contactos, que fueron breves, pero que seguro darán de sí en el futuro como Manu, Bea y Domingo. A todos ellos decirles que ha sido un placer.


Día 10: Looper, Bestias del sur salvaje y Spring breakers cierran el festival de manera brillante

Empezábamos el día con la cinta de ciencia ficción y acción Looper. Quizás me llevó la emoción y el tiempo me hace ver que estoy exagerando, pero Looper me fascinó, me moló una barbaridad, me hizo presenciar un par de escenas (una sobretodo) que me parecen de lo mejor de los últimos tiempos, me mantuvo fijo a mi asiento, emocionado, centrado, excitado. Quizás la película tiene algún altibajo, pero me parece lo mejor en ciencia ficción que he visto en años. Mezcla el género con algo de acción, con drama y con una historia muy potente e imprevisible, que muta a mitad del film y que termina como hace tiempo que no he visto terminar a un film comercial. Cine para todos los públicos, de calidad y potente. Nota: 9

Luego salté a The thieves cinta de atracos coreana que quiere imitar el cine comercial americano y que con un gran presupuesto, ofrece una historia de más de dos horas de atracos y traiciones grandilocuente y de mucho lío argumental que se me hizo larguísima, que está hecha sin alma y que pese a alguna secuencia acertada me parece muy poco digna de ser uno de los títulos del año en Corea. Nota: 4

En tercer lugar vino Bestias del Sur salvaje. Se trata de una cinta independiente americana muy especial y que levantó opiniones muy contrapuestas. La cinta nos habla de una zona arrasada por las inundaciones en un lugar pobre de EEUU (el lugar es inventado, pero la metáfora es obvia) desde la mirada de una niña. Uno de los puntos más fascinantes de la película es esa mirada inocente a un mundo muy salvaje, muy pobre, que a parte de esa inocencia la carga de una estética muy onírica, muy difusa, muy vaporosa que la diferencia del resto de propuestas sobre estas situaciones. La película nos habla de la libertad, de los sentimientos primitivos, básicos, de la parte netamente animal que poseemos en nuestra esencia y nos muestra una relación padre-hija de amor sin afecto que tiene un par de momentos en los que es muy difícil no emocionarse. Una joyita, muy pequeña, muy especial, que quizás, aún dará mucho de que hablar este año cuando lleguen las entregas de premios. Nota: 8

Y para terminar, el festival nos brindó como sesión sorpresa Spring Breakers de Harmony Korine, supongo que para terminar con la honda que lo marcó, los extremos y la polémica. Muy pocos de los presentes habrían visto cine de Korine y estaban muy lejos de saber al tipo de persona a la que se enfrentaban. Incluso los que habíamos visto su filmografía, creíamos que la cinta, con geniales críticas en Venecia sería bastante convencional. Ni de coña. Spring Breakers es una genial tomadura de pelo de un director que es un loco, un outsider  y que te puede llevar a amarla o a odiarla con todas tus fuerzas. Yo amé su segunda mitad, pero creo que la primera es justita, así que mi nota se queda en buena sin más, aunque reconozco que desde ayer sus imágenes no dejan de perseguirme y estoy deseando volverla a ver de nuevo. Y es que la película toma actrices de la generación Disney Channel para sacarlas con poca ropa y mostrarnos como se drogan y practican sexo (muy pudorosamente, éso sí) mientras buscan su lugar en el mundo. Cargada de mala leche y con una historia que en la segunda parte muta a una cinta de gángsters y violencia, Spring breakers es una cinta muy parecida a meterse un chute. Rodada en su primera mitad como un videoclip de mal gusto a cámara lenta y la segunda como un viaje alucinógeno de colores y repeticiones y tonos fosforescentes e irrealidad, la cinta es única, provocativa y muy irreverente. Bascula entre la genialidad y la estupidez. Pero si alguien recuerda Gummo u otras cosas de Korine, ya verá que el tipo siempre ofrece dudas sobre sus capacidades. En este caso, muchos la hemos flipado, nunca mejor dicho.  Nota: 7'5

Mi Top-15 del festival

Pues terminamos con este top-15 muy personal para cerrar el trabajo de esta edición 2012. Obviamente, los carteles ya sin comentarios, ya que de todas las películas se ha hablado durante estos diez días o en el post previo. Faltaría más, se admiten opiniones. Gracias por estar por aquí. Sitges ha terminado, pero el cine sigue en Lost Highway Blog.


15- Sound of my voice

















14- Seven Psycopaths











13- Safety not guaranted












12- Pietà





















11- Holy Motors















10- Berberian sound studio















9- Spring breakers


















8- The cabin in the woods

















7- Children who chase lost voices from deep below





















6- Beasts of the southern wild

















5- Wolf children





















4- Headshot





















3- The lords of Salem





















2- Looper

















1- Cosmopolis