Crónica del Festival de Sitges 2010. Viernes, 8

Día 2: El Resplandor ilumina Sitges

Hoy, la portada del diario del Festival (ayer fue portada el cartel de esta edición), está dedicada a una película de la golfa de hoy dedicada a Paul Naschy (película del 72 que ayer no se proyectó en la sesión de homenaje). Quizás con ello el Festival pretenda difuminar el poco tacto que tuvo ayer, en el horario de programación del homenaje.

Hoy he empezado a media mañana con la película china A woman, a Gun and a Noodle Shop, del maestro Zhang Yimou. Remake muy libre de la primera película de los hermanos Coen, Sangre fácil, Yimou orientaliza la película, con personajes caracterizados con un delirio que mezcla como la comedia, el trhiller y el western, que sirve al director para fotografiar paisajes áridos y paisajes nocturnos, de belleza hiriente. El único problema puede ser que no aceptes tan delirante propuesta y no entres en la película. Le pondremos un 3 sobre 5 que quizás se queda un poco corto.

Como tengo unas cuantas horas, antes de la siguiente proyección, al mediodía me paso por el Brigadoon que empieza sus sesiones (ayer aún no funcionaba). El Brigadoon es un espacio de proyección gratuito, que sirve de cajón de sastre del Festival, donde se proyectan muchos cortometrajes (en una sección con premio) y donde te puedes encontrar de todo, pero en la mayoría de los casos, cine muy Freak. Pues bien, yo he visto una película japonesa trash e infame, de esas de ver para creer, que se titula Super Metal Beauty, rodada en cutre vídeo, con dos guapas señoritas y dos monstruos a lo Mazinger Z con efectos especiales mil veces peores (hoy en día) que el primer Star Trek. Aunque la proyección ha ido acompañada de ciertas risas y cachondeo de los asistentes, el aburrimiento era casi insoportable y la película no era demasiado disfrutable, incluso yendo con tan buena actitud. Otro día volveré a pasar por el Brigadoon a probar suerte. Hoy, no pude más que ponerle un 1 sobre 5.

Si algo destaca para mí de este festival, son las pocas propuestas tan interesantes de animación en comparación al año pasado, donde la animación invadió con éxito y buenas propuestas todas la secciones. Este año tan sólo están ubicadas en su sección, el Anima't y ni tan solo las propuestas de Anima't son, a priori, muy apetecibles. Con excepción, claro, de Welcome to the space show, película llamada a ser el anime del año, con un trailer buenísimo y de la que Sandra ya nos habló maravillas en la crónica de ayer. Pues bien, a las 18:30 h. entro a ver Welcome to the space Show con estas inmejorables espectativas, y lamentablemente, la película me ha decepcionado. Es cierto que visulamente es muy brillante, muy colorida, muy imaginativa e innovadora, pero el hecho de carecer de un guión hilvanado, confiando tan sólo en sus imágenes, y su larga duración, hacen que la película se haga pesada la mayor parte de su metraje. Pese a todo merece un 3 sobre 5. Por cierto, la película fue presentada por su director y su productor, como vemos en la foto.

Sin mucho tiempo para pensar, me dirijo al cine Prado donde me esperan un par de sesiones bastante alternativas. La primera, dentro de Noves Visions Ficció. Lo más importante de la vida es no haver muerto, que toma el título de una greguería de Ramón Gómez de la Serra y está dirigida por tres directores, bajo el seudónimo de un colectivo: Olpama.

Dos hechos ya de por sí originales, para una película sugerente y muy original, que trata en clave de comedia triste unos hechos que bordan el surrealismo, pero que acaban por trascender a lo más profundo del ser humano. Realizada con un blanco y negro y unos encuadres trabajadísimos, esta producción española al margen de la industria demuestra que el cine español aún tiene mucho que decir, y que en los próximos años (pronóstico mío) oiremos hablar mucho de un cine español marginal, que interesará muy mucho a los más cinéfilos. Un 4 sobre 5.

La segunda propuesta, Catfish, está ubicada en la Sección Noves Visions no Ficció y es, seguramente, lo mejor que he visto hasta ahora en el Festival. Partiendo de una premisa muy simple, el seguimiento de la relación de uno de los directores con una familia vía facebook, la película gira hacia la investigación particular, cuando se sospecha que la familia en cuestión parece mentir. Tratada brutal sobre la soledad, la alineación y la mentira en la era digital, la película consigue estos resultados, quizás sin que los directores lo pretendan, de forma innovadora y además demuestra que cualquiera puede hacer una película. Y una cosa más, y al final nos planteamos hasta qué punto aquello que se nos está explicando es un documental, o un relato ficcionado. Un 5 sobre 5.

El largo día, he pisado Auditori, Brigadoon, Retiro, Prado y he vuelto al Auditori. Termina, con la proyección de El Resplandor, la película a que se rinde homenaje este año. La proyección en pantalla grande y con metraje extra vale la pena, pese a que, para ser honestos, quizás es una de la películas de Kubrick que peor está tratando el tiempo, sigue teniendo escenas icónicas y de gran fuerza. Imprescindible. 5 sobre 5.