Mi película de la semana
No recuerdo casi ninguna película que en los últimos años haya despertado unos elogios tan unánimes como la francesa The Artist. Prácticamente todas las críticas que he leído sobre ella, sean de colegas blogueros o de críticos profesionales, la tildan de obra maestra. Hay alguna excepción, claro. En este caso quiero reseñar la de mi admirado Quim Casas que le pone en el Periódico 3 estrellas sobre 5 alegando que la película no profundiza en ese momento que se llevó tantos artistas por delante que es el momento de cambio del cine mudo al sonoro. Es cierto, pero creo que Quim Casas se equivoca, ya que la película no pretende para nada entrar en el campo de la crítica o el melodrama. Es tan solo (y es mucho) un homenaje a una forma de hacer cine que se ha perdido (la de finales de los años 20 y principios de los 30) pero también nos contagia de la pasión con que la gente vivía el cine (tanto el público como los profesionales) y de la cierta inocencia y oportunismo que se respiraba ante el nuevo arte y forma de entretenimiento. Si queréis ver un estudio serio y profundo sobre la evolución del cine y el arte en aquellos años, como a Quim Casas, la película se os quedará algo huérfana. Si queréis disfrutar del cine como espectáculo, como pasión, entonces es vuestra película.
La historia que cuenta The artist no es para nada original y la hemos visto en muchas otras historias hasta la fecha. Se trata del declive de una estrella rutilante que además debe asistir al estrellato de alguien que era una simple desconocida cuando él estaba en la cumbre. Todo ello enmarcado en los años en que el cine mudo sucumbía al sonoro y muchas estrellas sucumbían con él. El mérito de la película es que para explicar la historia lo hace emulando el cine que se realizaba en aquellos años. Así, la película es muda y obviamente en blanco y negro, pero además captura la magia que trasmitía el cine popular de finales de los años 20. Los más cinéfilos sabrán buscar y encontrar decenas de referencias y guiños al cine de aquella época. Los que no saldrán contagiados de un espíritu optimista que los llevará en volandas incluso horas después a la proyección. Porque The artist es una película blanca, para todos los públicos, optimista y muy tierna.
La dirección de la película es brillante. Es una obra claramente arriesgada sino suicida pero su director, sabe acercarla con su emoción al público de hoy en día y además a un público potencialmente amplio. La ambientación, los números, las texturas, los movimientos de cámara y las interpretaciones nos acercan como nunca antes lo había hecho al cine actual al cine del final de la época silente. La historia, emotiva, cargada de una cierta inocencia naïf, también. La música de Ludovic Bource es espléndida y las interpretaciones sensacionales. Brillan en primer lugar secundarios como James Cromwell o John Goodman, pero sobretodo su pareja protagonista, un sublime Jean Dujardin que se transforma de forma precisa en un galán de los orígenes del cine y que llena su personaje de comicidad, ternura y vulnerabilidad y una hermosísima Bérénice Bejo, a la que el blanco y negro y la caracterización pretérita le otorga a su rostro una belleza tan dulce como hiriente, tan sutil como rotunda. Ella acompaña sus rasgos de una expresividad asombrosa y pasa de la risa al llanto con la misma facilidad con que el espectador pasa al verla de la ternura a la felicidad.
Quizás The artist no sea una obra destinada al gran público pues yo conozco a muchas personas cercanas que se reirían de mí si les recomendase una película muda (la incultura es terrible, sobretodo cuando no se es consciente de ella). Así pues no es recomendable para consumidores de cine comercial basura sin interés por abrir el abanico de gustos ni quizás para super intelectuales que aprovecharán la película para adoctrinarnos con posibles fallos o juicios pretenciosos. Es recomendable para todo el resto de público. Porque The artist es emoción, es amor al cine, es arte, es alegría, es optimismo, es vida, es enamorarte y llorar y sufrir y bailar y reír y soñar... The artist es cine con mayúsculas. No os la perdáis.
Otros estrenos que he visto
Pues vi en el festival de Sitges, no de este año sino del anterior, la interesante, original y extraña película española Lo más importante de la vida en no haber muerto de la que guardo un muy buen recuerdo. La sinopsis dice que Jacobo, un atractivo afinador y reparador de pianos, vive en Cataluña con Helena, su mujer. Todas las noches duerme profundamente y sueña que se despierta en una casa llena de pianos milagrosamente afinados. Pero, de repente, el insomnio trastorna completamente su apacible vida y lo sumerge en un estado de confusión.
Os adjunto lo que dije entonces sobre ella en este mismo blog "Lo más importante de la vida es no haber muerto toma el título de una greguería de Ramón Gómez de la Serna y está dirigida por tres directores, bajo el seudónimo de un colectivo: Olpama.
Dos hechos ya de por sí originales, para una película sugerente y muy original, que trata en clave de comedia triste unos hechos que bordan el surrealismo, pero que acaban por trascender a lo más profundo del ser humano. Realizada con un blanco y negro y unos encuadres trabajadísimos, esta producción española al margen de la industria demuestra que el cine español aún tiene mucho que decir, y que en los próximos años (pronóstico mío) oiremos hablar mucho de un cine español marginal, que interesará muy mucho a los más cinéfilos."
Resto de estrenos del viernes 16 de diciembre
Pues el más destacable, comercialmente hablando, es la cuarta entrega de Misión imposible, de nuevo con Tom Cruise, producida por J.J. Abrahams y en este caso dirigida por Brad Bird, el realizador de dos joyitas Pixar como Los increíble y Ratatouille y de una joyita animada anterior El gigante de hierro. Parece ser que la película cumple las expectativas y ofrece acción y diversión a raudales. Entre el resto de estrenos otro estúpido remake (y van...) como es Perros de paja, una filosófica y positiva película española con buen reparto bajo el extraño título de Maktub, la muy temible Alvin y las ardillas 3 con el bueno de Jason Lee en hora muy bajas, la cinta independiente americana El futuro que levanta opiniones muy encontradas, el documental español Hollywood Talkies, que podría verse en sesión doble con The artist al tratar de forma muy distinta el mismo tema y la misma etapa en el mundo del cine, es decir, el paso del mudo al sonoro, la comedia romántica húngara El musical, el drama español Bellos suicidios y el documental americano Vidal Sasoon, estos tres últimos, sin ninguna referencia.
Quedan dos viernes para finalizar el año. La semana que viene elegiré como "mi película de la semana" la cinta de espionaje El topo que tiene unas muy buenas críticas y está dirigida por Tomas Alfredson que realizó hace unos pocos años esa obra maestra indiscutible titulada Déjame entrar (la sueca, claro). La siguiente semana se estrena Drive, sin duda una de las mejores películas del año, pero como yo la vi en Sitges, supongo que dedicaré el último espacio del año a descubrir la última del gran Kaurismaki Le havre. El cine que viene promete y allí estaré para contarlo.
David Amorós,
ResponderEliminarme ha gustado mucho tu entusiasta reseña,creo en general cuesta mucho menos hablar de algo que nos gusta y a todas luces,hemos disfrutado.
No he visto The artist todavía,pero como tu mencionas,las excelentes críticas vienen unánimes tanto de público como de crítico y eso no es muy habitual.
La veré y espero salir del cine,como mínimo,bailando algunos pasitos de claqué o tarareando alguna cancioncilla de los años 20 o 30...je,je
Ahhhh! no sabes las ganas que además tengo de ver "Le Havre".
Abrazo!
"Así pues no es recomendable para consumidores de cine comercial basura sin interés por abrir el abanico de gustos ni quizás para super intelectuales que aprovecharán la película para adoctrinarnos con posibles fallos o juicios pretenciosos" Más claro el agua.
ResponderEliminarMuy buena reseña para una película que ha sido para todos los que hemos podido disfrutarla la gran sorpresa del año.
Un saludo David!
David, cómo me gusta leerte tan entusiasmado, con lo comedido que acostumbras a ser hasta con lo que te gusta.
ResponderEliminarAyyy... tengo unas ganas de verla... también quiero salir del cine con esas emociones a flor de piel y encima disfrutando de lo que generan, el interés y el aprecio por la vida...
Respecto a la opinión de Quim Casas..., las emociones que nos despierta el cine son subjetivas y no todas las películas nos cogen con el mismo ánimo y lo que a mi me emociona porque toca alguna fibra sensible de mi mundo interior... a otra persona la deja indiferente.....
En fin... que tengo ya ganas de verla.
Un abrazo!!
Joer, cada vez tengo más ganas de verla.
ResponderEliminarSaludosl
Roy
Te he leido con mucha atención, y de la lectura se palpa el entusiasmo pero también que el homenaje es evidente y que el guión es archiconocido. Tomo buena nota y valoro tu opinión. Pero no te oculto que esta operación de vuelta al cine mudo me mosquea bastante. Tampoco te oculo que el hecho de que provenga de Francia me mosquea aun más, y no por que tenga nada contra el cine galo, sino por que son muy dados a estas operaciones.
ResponderEliminarEs muy, muy dificil recrear las obras maestras del mudo. Me parece una tarea extremadamente complicada. No se si estaremos cerca de piezas como "Cabiria" "el viento" o "las dos huérfanas".Ya se que el argumento va por otro lado y es del tipo ha nacido una estrella. Todo el mundo parece estar deseando verla. Pero curiosamente algunos amigos que tengo hablan de ella sin parar pero pasan olímpicamente del cine de los años 20.No se si me explico.
Aun así, no se si podré verla,ni otras tampoco, ando pelín liadillo.Un saludo afectuoso.
No hay que dudar ni un segundo: hay que verla y disfrutar, cosas así no pasan todos los días.
ResponderEliminarUn abrazo
P.D.: ver "Le Havre" también, no es negociable. (las dos fueron las películas que más me gustaron del festival de Sevilla)
Este año tuve un pequeño encuentro con muchas peliculas grandiosas de la epoca del cine mudo, como El Chico, El cameraman, Luces de la ciudad, Metropolis entre otras. Y ahora con la aparicion de The Artist seguramente muchos sentirán nostalgia por aquel cine que nunca debio terminar.
ResponderEliminarAnsio ver la pelicula pronto. Los premios que esta recibiendo es un gran homenaje, sin duda alguna.
Un abrazo David.
Sí señor, muy buena. El finde pasado la volví ver. Es cierto que la historia no es nada del otro mundo pero la película está hecha con mucho cariño y se nota. La música de Bource es genial y los planos de la película son muy buenos. Ahh! Y no nos olvidemos de la interpretación canina jaja. La verdad es que le comí la olla a unos colegas, que en principio eran bastante reticentes, y les encantó. Que buen rollo de peli.
ResponderEliminarEsta noche voy a una preestrena de El topo, que también le tengo muchas ganas, a ver que tal. Drive y Le Havre dos joyitas más. Me encanta la crítica David, se nota el entusiasmo. Un abrazo!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu crítica. Esta semana voy a verla pero sé que me va a gustar!!
ResponderEliminarUn abrazo y felicidades!!
Cuando la vea te digo mi apreciación e igual solo será mi perspectiva, seguiremos siendo amigos como cuando pusiste que la vida de los peces era una mala película al poco de que dije que era muy buena (¡respetable totalmente! argumentos y convivencia Dios los bendiga), pero me parece que me va a gustar, el homenaje al cine o que sea muda en pleno siglo XXI me parece muy interesante, mi instinto me dice que Quim Casas se ha equivocado. Abrazos.
ResponderEliminarEs cierto Troyana, siempre es mucho más agradable hacer la crítica cuando nos sentimos entusiasmados. Estaré atento a lo que expliques cuando la veas pero tengo la sensación de que tmbién te encantará. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Sidhe. La verdad es que sí, ha sido la gran sorpresa del año. Supongo que vosotros también la pudistéis disfrutar en Sitges. La ovación en el Auditori fue brutal. Un abrazo.
Espero tu opinión Laura, aunque estoy casi seguro que te emocionará. La verdad es que no soy muy consciente de ser comedido cuando algo me gusta, más bien procuro lo contrario, pero si es tu impresión, bienvenida sea. En cuanto a Quim Casas, lo he citado porque es el crítico al que más admiro y al que más caso hago y me ha chocado su enfoque. Que considere que se equivoca en el enfoque no quiere decir que no lo respete, faltaría más. Pero se trata de polemizar un poco, no? Un abrazo.
Bueno Roy Bean, a ver si tan buenas críticas no te impiden disfrutarla, que a veces cunado nos hablan tan bien de algo... Un abrazo.
Te explicas perfectamente V, pero que guste a tus amigos sin que quieran ver las fuentes ni el origen y me guste a mi y a otros colegas con los que la vi en Sitges y que sí hemos visto mucho cine mudo dice mucho en favor de la película. Como bien dices, va más en la linea de Ha nacido una estrella que de las tres obras a que aludes y dentro del mudo podría acercarse más a películas bienintencionadas y románticas o incluso a Chaplin (aquí sí, salvando las distancias, claro). Y no acabo de creer que hacer cine mudo hoy en día sea una operación de marketing, sino más bien un riesgo que ha salido bien por la brillantez del conjunto. Si la terminas por ver no dudo en que opinarás. Un abrazo.
Pues espero con gans Le Havre, Ethan, que también viene precedida de buenas opiniones y críticas por los que ya la habéis visto y además, como digo, me encanta el director finlandés. Un abrazo.
ResponderEliminarTe leeré Daniel, aunque pondría la mano en el fuego que te encanta. Un abrazo.
Gracias BCNdays. Ya te leeré a ver que tal El topo. Yo tengo muchas expectativas tras la anterior peli de este director. Y con The artist, ya íbamos avisados en Sitges por vosotros y a veces, cuando tienes las expectativas muy altas el film te acaba por decepcionar y sin embargo ya ves. Y es que como dices, contagia buen rollo. Un abrazo.
Gracias Criticón 5.1, te leeré a ver si se confirma tu presentimiento. Un abrazo.
Faltaría más, Mario, si nos enfadamos por no estar de acuerdo mejor nos dediquemos a otra cosa. Es la gracia de opinar sobre cine. De todas formas en este caso creo que no nos tiraremos los platos por la cabeza, como tu intuyes. Un abrazo.
Me voy a poner a leer críticas de blogs que me interesan sobre The artist y el primero en la lista, después de leer el de Raül (Laguna negra), es el tuyo, David… una vez leído comentarte que…
ResponderEliminarMe atrae eso de los cambios históricos que afectan a diversas partes o aspectos de la humanidad. Ocurre en El hombre que mató a Liberty Valance, ocurre en El cuarto mandamiento, de Orson Welles, ocurre en ésta, por lo que veo, en el cambio del cine mudo al sonoro y los daños colaterales causados.
Por lo que comentas sobre su blancura supongo que, de existir todavía Capra, ésta sería una película que le iría muy bien.
Eso que dices: es arte, es alegría, es emoción, vida, amor al cine, etc es muy francés cuando les sale; sino sólo hay que ver Amélie para darse cuenta.
De la española que hablas, Lo más importante de la vida es no haber muerto, no sabía nada (estoy hecho un vago últimamente y me entero poco de estrenos, ni siquiera interesantes como parece éste, y hechos aquí).
Un abrazo y feliz Navidad, David. Gran post.
David, tengo muchas ganas de ver the artist, tiene muy buena pinta y más después de tu post.
ResponderEliminarTú lo has dicho... la ignorancia es osaba.
Besos.
Oye, en que fecha publicaste la animación de la isla de los recuerdos olvidados? tengo interés en leerlo.
Pues tienes razón Javier Simpson, la película podría ser muy de Capra. El contexto es ideal para hablarnos de la historia pero no profundiza demasiado en la historia real, es un poco el pretexto, pero la estética que utiliza para recrear ese contexto, copiándolo, es sensacional. y la española es una raeaza que merece la pena. Un abrazo.
ResponderEliminarPues Isabel, en realidad casi que solo la recomiendo sin hablar de ella casi nada, solo citándola, en el primer post de este blog a raíz del festival de Sitges de hace dos años. El primero del 2009, que puedes buscar en el margen derecho, un poquito más abajo. LA cito en su título original, Oblivion Island. Un abrazo.
Qué atrevimiento, una película muda, no se había visto algo así desde "La última locura" (Silent Movie) de Mel Brooks. "The Artist" me ha gustado mucho a pesar de mi recelo con las películas que me ponen por las nubes. Me ha recordado el caso de John Gilbert y otras estrellas del cine mudo perjudicadas por el paso al sonoro. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarPeliculón en toda regla, una de las mejores del año sin ninguna duda. Quien no la haya visto aún ya tarda. Un abrazo.
ResponderEliminarIré a verla mañana. Te doy mi opinión pronto. Este fin de semana también tengo previsto ver 'El topo' y 'Nader y Simin'. Un abrazo.
ResponderEliminarEs bastante unánime Borgo. La película merece la pena. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Daniel Gálvez. Espero sigan nuestra recomendación. Un abrazo.
Pues vaya fin de semana jordicine. Yo espero ver El topo y a ver si aún engancho Nader y Simin, que no la vi en su momento. Ya dirás. Un abrazo.
Por lo visto "The Artist" es una película para gozar, sobre todo para quienes amamos el cine. Quiero verla lo más pronto posible.
ResponderEliminarQue pases unas Felices Fiestas tocayo.
David C.
Pd: Ya respondí tu pregunta sobre cine peruano en el blog.
Te descubro a través de Troyana, y me encanta tu crítica...
ResponderEliminara mi me entusiasmó...
te ficho ;-)
Gracias BArgalloneta. Bienvenida. Un placer compartir la admiración por The Artist contigo. Un abrazo.
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