Pues seguimos con esta segunda entrega de sesiones dobles de cine latino y hoy nos acercamos a Brasil para hablar de las películas Tropa de élite y Tropa de élite 2, esta segunda con un título original que lleva el explícito apéndice "Ou inimigo agora e outro", ambas dirigidas por José Padilha.
Quizás tras la omnipresente Ciudad de Dios de Fernando Meirelles, las películas Tropa de élite son las más conocidas y valoradas de la reciente historia del cine brasileño, con permiso de Estación central de Brasil de Walter Salles. Si tenemos en cuenta que el cine brasileño está viviendo seguramente su edad dorada estos últimos años, no me parece arriesgado decir que las dos películas que hoy tratamos están, como poco, entre las diez más importantes de la historia del cine brasileño. Y digo como poco porque el cine brasileño anterior es muy poco conocido y no demasiado valorado. Tras una etapa de cine mudo poco prolífica en la que a día de hoy destaca solo la película Límite de Mario Peixoto, que además en su día tuvo una muy débil acogida en su país, el cine brasileño pasa por los años 30 y 40 sin pena ni gloria, sumido en un excesivo populismo, hasta mediados de los 50, cuando surge la corriente conocida como "cinema nôvo" que en primer lugar será influenciada por el neorrealismo italiano y más tarde por la nouvelle vague francesa. Estas películas renuevan el cine brasileño y dan ciertas ínfulas autorales e investigaciones formales a un cine que hasta entonces había estado anquilosado en una estricta comercialidad. Quizás el director más importante de este periodo, combativo y social, fue Glauber Rocha con títulos estrella como El dragón de la maldad contra el santo guerrero, Tierra en trance, Barravento o Dios y diablo en la tierra del sol. Otros cineastas importantes del periodo son Anselmo Duarte (El pagador de promesas), Nelson Pereira dos Santos (Vidas secas), Ruy Guerra (Los fusiles) o Carlos Diegues (Ganga Zumba). En otra linea, cercana al cine de terror bizarro, destaca la personalidad y las películas, totalmente de culto en nuestros días, del cineasta José Mojica Marins conocido popularmente como Zé do Caixão con títulos tan míticos como A medianoche me llevaré tu alma o Esta noche poseeré tu cadáver. Posteriormente a esta época, en los años 70 y 80, el cine está muy dominado por la burocracia y el estado y el número de películas y su calidad bajan de manera importante, pudiendo salvar a cineastas como Héctor Babenco y Bruno Barreto, autores de las dos películas más importantes y populares de la época como Pixote y Doña Flor y sus dos maridos, respectivamente.
Y volvemos al inicio del post y a las películas más importantes de la cinematografía brasileña de los últimos años: Ciudad de Dios de Fernando Meirelles, Tropa de élite de José Padilha y Estación central de Brasil de Walter Salles. Quiero destacar estas tres películas para hacer notar que si a la cinematografía brasileña le cuesta encontrar directores estrella, más difícil lo tendrá en un futuro en cuanto a que los tres citados ya han sido requeridos por Hollywood para dar el salto a su industria dejando huérfano el estrellato autoral del cine brasileño que deberá nutrirse de nuevos talentos. Si Fernando Meirelles supo aprovechar la oportunidad con películas como El jardinero fiel o A ciegas, menos suerte tuvo Walter Salles al que se encargó un remake del film de terror japonés Dark Water que se tituló La huella, aunque ahora tiene pendiente de estreno la adaptación de la novela Jack Kerouac On the road, una empresa muy difícil de salir airoso pero a la que habrá que estar atento. El hombre al que hoy dedicamos el post, José Padilha, también va a dar el salto a Hollywood y creo que está destinado al fracaso, pues se le ha encargado un remake del film de Paul Verhoeven Robocop. Difícil de salvar.
Tanto Tropa de élite como Tropa de élite 2 son dos películas muy notables que tratan de la BOPE (Batallón de Operaciones Policiales Especiales) y de su falta de escrúpulos a la hora de enfrentarse a la gente que habita en las favelas y se nutre del narcotráfico. Yo prefiero la primera a la segunda, más directa, con una historia más minimalista y con un punto de exhibicionismo, aunque la segunda también es muy recomendable.
Tropa de élite es una película del año 2007 dirigida por José Padilha, un director nacido en 1967 en Río de Janeiro y que debutaba en la ficción con esta película (antes tenía un par de documentales, uno de ello para televisión). Como decía la película trata del BOPE y se centra en uno de sus integrantes, el capitán Nascimiento, que con una mujer a punto de dar a luz se plantea retirarse de dicho cuerpo, pero no sin antes encontrar un sustituto que esté a su altura. A partir de ahí la película muestra un par de asaltos a las favelas en las que no escatima la violencia ni la crudeza de la situación, un par de escenas íntimas de nuestro protagonista torturado, el brutal método de entrenamiento que se usa para elegir a los destinados a trabajar en dicho cuerpo (escenas algo autoindulgentes, incluso con un punto de humor macabro en su brutalidad e incluso un poco influenciados por las películas americanas sobre entrenamientos salvajes de ejércitos) y la corrupción que envuelve a la sociedad brasileña en general, sobretodo a la policía "común". Dirigida con increíble pulso, sobretodo para tratarse de un debutante, ya que logra trasmitir la adrenalina de las operaciones suicidas y de los entrenamientos, los nervios, la tensión y la violencia insalvable de un país en constante estado de guerrilla e interpretada con innegable solvencia por Wagner Moura, la película se acerca a las máximas de la corriente naturalista al proponer que los humanos debemos básicamente nuestro comportamiento al lugar en el que hemos nacido, sin demasiada posibilidad de cambio. No hay juicios morales, no hay maniqueísmo, hay posturas antagónicas e insalvables que acercan al asesino violento de las favelas y al integrante de la BOPE a un mismo universo, al del odio irreversible, al del enfrentamiento, al de la violencia radical.
La película, que ganó el Oso de Oro en el Festival de Berlín y que batió récords de taquilla en Brasil tuvo una tibia acogida de público y crítica en España, cuando se estrenó el 18 de julio de 2008. Debido a esta débil presencia de público, la segunda parte no ha tenido distribución en nuestro país. Podemos quejarnos, claro, pero tenemos la distribución que el país merece.
Por suerte, de momento, tenemos internet, un lugar donde encontrar y disfrutar de aquello que la distribución no nos ofrece. Tropa de élite 2, del 2010, ahonda en la corrupción que domina el país y convierte en compleja la relativamente minimalista historia de la primera parte. Aquí la corrupción no solo la tiene la policía "común" sino sobretodo los políticos y los altos estamentos del estado, más pendientes de favorecer sus intereses políticos que de solucionar el problema con las favelas y la violencia. La película, pese a estar muy bien realizada, es algo más previsible y más cercana a otros títulos que ya hemos visto a lo largo de la historia del cine. Además, la integridad del capitán Nascimiento se hace obvia y se nos presenta, al final, pese a sus trazos algo fascistas, como el bueno de la película, rompiendo en parte la ambigüedad moral que la primera entrega nos presentaba. Excepto él y muy pocos más, el resto de la gente está corrompida y son basura en altos estamentos de la sociedad. Éso sí, cierta crítica a una izquierda que defiende a los débiles y a los delincuentes por defecto y que son tratados como absolutos estúpidos e ignorantes y motor en parte del problema social está tratada con mucha saña y en parte, con mucha precisión. Son los instantes con un guión de muy mala baba lo mejor de Tropa de élite 2, el resto está bien dirigido, bien interpretado y bien resuelto, aunque la dispersión de la trama y el tema universal de la corrupción tan tratado en cine otras veces, resta algo de potencia a aquella salvaje historia sin concesiones que habíamos visto en la primera mitad. Y éso que quizás la violencia es aún más explícita, más salvaje y menos injustificable. Sea como fuere, dos películas que merecen de vuestro tiempo y que nos acercan a un problema diario en la sociedad brasileña y nos enfrenta a ciertos dilemas morales que cada uno de nosotros deberá resolver.
Tanto Tropa de élite como Tropa de élite 2 son dos películas muy notables que tratan de la BOPE (Batallón de Operaciones Policiales Especiales) y de su falta de escrúpulos a la hora de enfrentarse a la gente que habita en las favelas y se nutre del narcotráfico. Yo prefiero la primera a la segunda, más directa, con una historia más minimalista y con un punto de exhibicionismo, aunque la segunda también es muy recomendable.
Tropa de élite es una película del año 2007 dirigida por José Padilha, un director nacido en 1967 en Río de Janeiro y que debutaba en la ficción con esta película (antes tenía un par de documentales, uno de ello para televisión). Como decía la película trata del BOPE y se centra en uno de sus integrantes, el capitán Nascimiento, que con una mujer a punto de dar a luz se plantea retirarse de dicho cuerpo, pero no sin antes encontrar un sustituto que esté a su altura. A partir de ahí la película muestra un par de asaltos a las favelas en las que no escatima la violencia ni la crudeza de la situación, un par de escenas íntimas de nuestro protagonista torturado, el brutal método de entrenamiento que se usa para elegir a los destinados a trabajar en dicho cuerpo (escenas algo autoindulgentes, incluso con un punto de humor macabro en su brutalidad e incluso un poco influenciados por las películas americanas sobre entrenamientos salvajes de ejércitos) y la corrupción que envuelve a la sociedad brasileña en general, sobretodo a la policía "común". Dirigida con increíble pulso, sobretodo para tratarse de un debutante, ya que logra trasmitir la adrenalina de las operaciones suicidas y de los entrenamientos, los nervios, la tensión y la violencia insalvable de un país en constante estado de guerrilla e interpretada con innegable solvencia por Wagner Moura, la película se acerca a las máximas de la corriente naturalista al proponer que los humanos debemos básicamente nuestro comportamiento al lugar en el que hemos nacido, sin demasiada posibilidad de cambio. No hay juicios morales, no hay maniqueísmo, hay posturas antagónicas e insalvables que acercan al asesino violento de las favelas y al integrante de la BOPE a un mismo universo, al del odio irreversible, al del enfrentamiento, al de la violencia radical.
La película, que ganó el Oso de Oro en el Festival de Berlín y que batió récords de taquilla en Brasil tuvo una tibia acogida de público y crítica en España, cuando se estrenó el 18 de julio de 2008. Debido a esta débil presencia de público, la segunda parte no ha tenido distribución en nuestro país. Podemos quejarnos, claro, pero tenemos la distribución que el país merece.
Por suerte, de momento, tenemos internet, un lugar donde encontrar y disfrutar de aquello que la distribución no nos ofrece. Tropa de élite 2, del 2010, ahonda en la corrupción que domina el país y convierte en compleja la relativamente minimalista historia de la primera parte. Aquí la corrupción no solo la tiene la policía "común" sino sobretodo los políticos y los altos estamentos del estado, más pendientes de favorecer sus intereses políticos que de solucionar el problema con las favelas y la violencia. La película, pese a estar muy bien realizada, es algo más previsible y más cercana a otros títulos que ya hemos visto a lo largo de la historia del cine. Además, la integridad del capitán Nascimiento se hace obvia y se nos presenta, al final, pese a sus trazos algo fascistas, como el bueno de la película, rompiendo en parte la ambigüedad moral que la primera entrega nos presentaba. Excepto él y muy pocos más, el resto de la gente está corrompida y son basura en altos estamentos de la sociedad. Éso sí, cierta crítica a una izquierda que defiende a los débiles y a los delincuentes por defecto y que son tratados como absolutos estúpidos e ignorantes y motor en parte del problema social está tratada con mucha saña y en parte, con mucha precisión. Son los instantes con un guión de muy mala baba lo mejor de Tropa de élite 2, el resto está bien dirigido, bien interpretado y bien resuelto, aunque la dispersión de la trama y el tema universal de la corrupción tan tratado en cine otras veces, resta algo de potencia a aquella salvaje historia sin concesiones que habíamos visto en la primera mitad. Y éso que quizás la violencia es aún más explícita, más salvaje y menos injustificable. Sea como fuere, dos películas que merecen de vuestro tiempo y que nos acercan a un problema diario en la sociedad brasileña y nos enfrenta a ciertos dilemas morales que cada uno de nosotros deberá resolver.
Genial que te hayan gustado ambas, aunque ya sabes que yo soy más de la segunda incluso que de la primera, pero las dos me parecen muy notables. Coincido en la brillante dirección de Padilha y yo quede alucinado con la interpretación de Wagner Moura, tan a años luz de la mayoría de sus papeles e incluso de su manera de expresarse en la vida real, parece otro!! (mirate algúna entrevista suya y verás porque lo digo). Por cierto, magnífica la introducción de cine brasileño, espectacular. Un abrazo.
ResponderEliminarSí Daniel, lo sé. A mí me pasó un poco al revés pero vamos, que ambas son buenas. Miraré alguna entrevista o imagen de Moura, me has hecho sentir curiosidad. Gracias. Un abrazo.
EliminarMuy intereresante el repaso. Es verdad que en los cuarenta y cincuenta ofreció cine muy folklórico y popular.No hay que olvidar a la mítica Carmen Miranda. Y es verdad que sus cineastas están en continua fase de exportación-importación. No me disgusta Diegues ni Salles,pero Babenco y Pereira dos Santos no me acabaron nunca de parecer esos grandes autores como en su momento se dijo.
ResponderEliminarSolo he visto la primera. Creo que tiene tensas secuencias de acción,algunas cámara en mano bien rodadas, y el clima esta logrado,aunque la impresión general es que está siempre a un paso de ese exhibicionismo que mencionas. Aunque es muy posible que la realidad en este caso supere la ficción. Muy documentado e interesante David. Un saludo.
Vaya V, que puesto estás en cine brasileño. Es cierto que está a un paso del exhibicionismo, pero creo que no lo cruza, o lo hace con estilo. Y casi seguro que la realidad supera la ficción. Un abrazo.
EliminarPues creo que es del cine que más puesto estoy. Es que tengo familia en Brasil,no te digo más. Allí Tropa de élite creó gran controversia. Piensan que por una vez que el cine brasileiro gana un premio internacional, es para daruna imagen de su policía un tanto heavy.Les pasó uigual con ciudad de Dios y con Estación central. Por si te interesa allí tienen como una joya patria un filme titulado "dias melhores virao". No está nada mal. Por cierto, ya de paso te digo que no les gusta nada que consideren su cine como cine latino, aunque lo sea.Ya sabes, el tradicional pique con Argentina y Uruagay, sobre el que se podría escribir un libro. Si algún bloguero brasileiro ve tu título te lo dice seguro, aunque yo comparto tu tíulo.Es cine latino.Un saludo
EliminarGracias V por aportar tanta información. El tema de películas de países o bien tercermundistas o bien con fuertes conflictos sociales que triunfan en EEUU o Europa por encima del resto de filmografía del país, sería un tema muy interesante a estudiar y a debatir, pero creo que es una constante. Si se reivindica una peli colombiana tiene que ser "La vendedora de rosas", si es brasileña o mexicana o favelas o narcotraficantes, si es africana ya ni te cuento, como el Oscar que se le dio a la sudafricana "Tsotsi", por otro lado una peli muy mediocre o la repercusión internacional de la marroquí "Ali Zaua, príncipe de Casablanca" todas ellas muy tremebundas. En fin, que como digo es un tema que creo tiene mucho que ver con la visión ´que los países europeos o EEUU tenemos del resto del mundo y que tiene mucho que ver con la superioridad que nos presuponemos. La película, obviamente me interesa. Gracias por aportarla y me voy a buscarla por estos mundos virtuales que me nutren de rarezas no editadas. Y respecto a lo del cine latino, lamento decirte que desconozco el conflicto que mencionas. Es obvio que por tema lingüístico el cine brasileño es la excepción del latino, pero más allá de ésto, como digo, lamento no conocer el conflicto. Si te apetece hacernos una breve explicación, por mí encantado. Gracias V. Ha sido muy interesante. Un abrazo.
EliminarColeguita!Perdona la tardanza en aparecer de nuevo por aquí. Has cambiado el diseño y todo. Me gusta mucho. Felicitarte también tu cumpleaños por aquí. Muchas felicidades.
ResponderEliminarSobre Tropa de Élite, he visto la primera y me gustó. Aunque no tampoco es la panacea que se vende desde algún sector de la crítica. Me sorprendió que la segunda parte fuera la representante al Óscar de Brasil. Padilha eso si, se ha ganado ya el hueco en Norteamérica.
Un abrazo.
Gracias por todo Emilio Luna, ya sabes que cuando quieras pasarte serás muy bien recibido.
EliminarLo de la segunda parte es algo sorprendente, sí, porque la violencia explícita es un poco anti-Oscar, pero quizás confiaban en la calidad. En fin, para el salto de Padilha a Hollywood, como bien dices, sí que ha servido. Un abrazo.
Uf.. Tropa de élite la vi hace ya un par de años y me pareció una gran cinta, nunca la pude volver a ver, pero tras su visionado me pareció buenisima, pero deberia volver a verla para darle un análisis objetivo. Su segunda parte aun no la cazo, espero hacerlo muy pronto.
ResponderEliminarUn abrazo David.
Para mí la segunda es más floja, pero ambas merecen la pena. La segunda está por la red. Un abrazo.
EliminarHola David. Gran repaso al cine brasileño.
ResponderEliminarA mí me gusta mucho más Tropa de Elite que Ciudad de Dios.
La segunda se ha llevado el éxito, pero la de Padilla me parece magnífica.
Totalmente de acuerdo que tenemos lo que nos merecemos. ¿Como es posible que Tropa 2, no se estrenara en nuestro país? Yo me la encontré por internet sin saber nada. Quede alucinado. Pero es lo que hay.
Un abrazo
A mí me gustan ambas mucho, pero quizás un poco más la de Meirelles. Y sí, si tras estrenar la primera no la va a ver nadie, pues nada de estrenar la segunda, que le quita copias a cualquier basura comercial. Qué pena!!! Un abrazo.
EliminarHe visto la primera y me gustó bastante, me sorprendió, no esperaba semejante cinta tan buena, la segunda la tengo hace tiempo en DVD pero todavía no la veo, no quería ver la continuación porque creí que explotaba el buen hacer de la primera pero leyendo en diversas partes y viendo su propuesta como nominada, me deje atrapar. A ver que tal resulta. Un abrazo.
ResponderEliminarPues no Mario, te guste más o menos es distinta a la primera, se hace más compleja y va mucho más allá. Dale una oportunidad. Un abrazo.
EliminarTodas esas pelis brasileñas que citas están muy bien, tanto Topa de élite (la última en ser vista) como Ciudad de Dios y Estación central de Brasil (súper emotiva).
ResponderEliminarGlauber Rocha dicen que es un enorme director de cine brasileño, de los clásicos. Intenté en su momento bajar algo de él, pero no lo pude conseguir. Quizás en este punto una manito de Isa, de Pelicuario no vendría mal ;-D
Me pega después de haber visto Tropa de élite que a José Padilha se le reclame desde Hollywood para hacer un remake de Robocop…puede encajar perfectamente, pero no deja de fastidiar que los de Hollywood se lleven gran parte de los directores más interesantes que hay por el mundo.
Por cierto, además de Estación central de Brasil, me gustó la peli que hizo en Hollywood de terror Walter Salles. Su ambiente está muy conseguido, es deprimente, y el final está muy bien.
Muy buen post, David. Enhorabuena. Un saludo…
Si aún te interesa Javier, mira en la página de clan sudámerica, la mejor para descargas latinas. Allí hay. Es cierto que Robocop parece encajar en el estilo Padilha, aunque es un poco una simplificación, ¿no? Y a mi, con la de Walter Salles de terror me ocurre que soy tan fan de la japonesa original que la mera comparación me hace descartarla, pero no estaba mal. Un abrazo.
EliminarTodavía no he visto la segunda parte pero la primera me gustó mucho. También tengo que decir que de las tres películas Brasileñas que he visto a Ciudad de Dios no le hace sombra ninguna, es espectacular. Estación central de Brasil la vi hace mucho y recuerdo que también me gustó. Creo que es una lástima que muchos directores se vayan de sus países ante las ofertas de Hollywood y no vuelvan, dejando como dices, al país en cuestión huérfano de cine de calidad y perdiendo personalidad en su propio cine. A veces sale bien, como el caso de Ang Lee o de Tomas Alfredson, otros declinan la oferta para no perder esa personalidad, como el caso de Almodovar, pero muchas veces es un auténtico desastre, el caso reciente que más me viene a la cabeza es el de Florian Henckel von Donnersmarck, que después de dirigir La vida de los otros (una de las mejores películas de la década pasada) dirigió The tourist, sin comentarios... Muy bueno el post David, una referencia indispensable para repasar lo que ha dado de sí el cine brasileño. Un abrazo!
ResponderEliminarPD. Por cierto, acaban de anunciar que Himizu de Sion Sono estará presente en el D'A. Ya me han alegrado el día ;)
A mí me gusta más la primera BCNdays, aunque la segunda está bien. Y quizás Ciudad de Dios me gusta un poco más aún que la primera de Tropa de élite, pero tampoco soy super fan.
EliminarBuenas citas de directores "adoptados" por EEUU. Alfredson nunca hará nada tan bueno domo "Déjame entrar" tanto si se queda en USA como si va a CHina, pero "El topo" está muy bien. Y "The tourist", ja,ja, no la he visto, aunque soy de los pocos que cree que "La vida de los otros" está muyyyy sobrevalorada.
He ido a mirar las nuevas películas confirmadas para el D'A, que buena pinta!!! Pero sin duda Himizu se lleva la palma. Yo también me quedé con las ganas en Sitges. Gracias. Un abrazo.
Confieso lo poco que sé del cine brasileño así que esta entrada me va muy bien. Sólo he visto "Estación central...".
ResponderEliminarLa verdad que con ese título no hubiera visto estas dos películas y por lo que explicas son interesantes de verdad. Las apunto y a ver si las puedo ver algún día.
Un abrazo!!
Pues me alegro Laura. Ahí queda por si alguna vez la quieres consultar. Y no olvides Ciudad de Dios que es genial. Un abrazo.
EliminarA mi me gusta bastante más la primera parte, esta segunda mas centrada en las idas de olla del policía (no recuerdo el rango) pero como bien dices, retrata bastante bien esas zonas de las grandes ciudades brasileñas. Tropa de Elite 1 para mi fue una sorpresa, esta no tanto.
ResponderEliminarSaludos
Roy
Pues yo básicamente estoy de acuerdo contigo Roy. Aún y con todo, me parece que la segunda es recomendable. Un abrazo.
EliminarHola! Les dejo un link del trailer de una película ecuatoriana que se estrenará en cines este año, por si a alguien le interesa saber qué se está haciendo en Ecuador. Saludos!!
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=mjOQb3ZYGw8
La película se llama Distante Cercanía, del cineasta Alex Schlenker
ResponderEliminarPues muy amable. Obviamente me interesa saber del cine que se hace y se estrena en Ecuador. Le echaré una ojeada y si pasado un tiempo considreo que merec la pena, la veré. No dudes que en esta sección de cine latino algún día le dedicaré un post a Ecuador. Gracias de nuevo. Un abrazo.
EliminarMe gusta mucho "Tropa de élite". No discursea y, como destacas, su brío narrativo es espectacular. Un abrazo.
ResponderEliminarPues coincidimos Ricard. Un abrazo.
EliminarYo también creo que la primera es mejor (pese a que soy muy, muy fan de las dos). Es que me es más atractivo el mantra de la "pérdida de la inocencia" de los idealistas cadetes que el del "todo está podrido" de la segunda parte. Pero bueno, recomiendo también que se vean ambas porque son dos peliculones en los que yo creo leer un mensaje de "siempre hay esperanza y merece la pena luchar por conseguir un mundo mejor, aunque haya que hacerlo a hostias", pero todos me dicen que esto es de mi cosecha, jejeje.
ResponderEliminarDiscrepo un poquito contigo porque yo creo que en la primera parte hay un mensaje más harrysucista que otra cosa, me parece verlo claro en la parte de los cooperantes de la oenegé, esos progres naífs, por eso se ha acusado a Tropa de Elite, desde algunos sectores, de "fascista" (la tontada de siempre) y por eso creo yo que el director decidió enmendar la plana en la segunda parte oponiendo al personaje de Nascimento el del poítico de izquierdas convencido de la necesidad de hacer siempre lo correcto, aunque luego termine pasando lo que tenía que pasar...
También me gusta mucho cómo emplea en ambas partes el recurso del fashback para narrar ambas historias y la gran cantidad de jugosos detalles que se pueden descubrir visionado tras visionado tanto en el plano cinematográfico como en el de denuncia o descripción de una realidad que vista aquí parece imposible. Yo confío en el trabajo de Padilha con Robocop, a fin de cuentas la historia original contaba algo parecido a Tropa de Elite: hablaba de la manipulación que desde el poder ejercían los "malos" sobre unos super policías de nobles ideales y expeditivos métodos, ¿no?. Y desde luego este director ha demostrado que en cuanto a ritmo narrativo le queda poco por aprender.
Bueno, en parte es tu cosecha, pero en parte tienes algo de razón. Estoy de acuerdo que carga algo las tintas contra la izquierda progresista, pero más que nada es que no estamos acostumbrados a una cierta crítica contra este colectivo. Pero en parte también critica al coronel, por eso creo que en realidad termina por no tomar demasiado partido, aunque si me presionas, te diré que creo que al director le cae bien su personaje principal (como se ve en la segunda parte) y le parece honesto, incluso en su presunto fascismo.
EliminarEl hecho de que le hagan hacer en Hollywood algo tan obvio, tan parecido a lo que ha hecho en Brasil, es lo que me da cierto coraje. Es más que posible que lo haga bien. Talento no le falta. Un abrazo.